Camila Fabbri, de Argentina; Joel Flores, de México; Francisco Ovando, de Chile y Marcela Ribadeneira, de Ecuador, nuevas voces de Latinoamérica que representan a los “Ochenteros”

En esta conversación se reunieron Camila Fabbri, de Argentina; Joel Flores, de México; Francisco Ovando, de Chile; y Marcela Ribadeneira, de Ecuador. Ellos forman parte de los 20 escritores elegidos para Ochenteros, una iniciativa de la Feria Internacional del Libro cuyo objetivo es que los autores seleccionados pongan en contacto su narrativa con los lectores, y con diferentes agentes de la industria editorial.

En su intervención, Camila Fabbri argumentó que percibe una estrecha relación entre los escritores desde la multidisciplina, ya que muchos trabajan desde la dramaturgia o a partir de la narrativa del cine.

En este sentido, el escritor mexicano Joel Flores comentó que lo que une a los escritores de su generación es el lenguaje, que es el lenguaje latinoamericano. Con esta idea como punto de partida, una de las tareas que propuso fue —siguiendo la lógica empleada por José Emilio Pacheco— comenzar a buscar a los escritores contemporáneos porque la literatura, además de ser una actividad solitaria, también se construye en colectivo.

Ribadeneira reconoció las diferentes formas de explorar la narrativa que los autores seleccionados para Ochenteros operan, es decir, la hibridación de géneros y formatos que conviven en una obra. Por su parte, Francisco Ovando destacó la importancia de las editoriales independientes, tanto en la construcción de la escena editorial local como la configuración del trabajo en conjunto; porque si existe algo que une a ese grupo de escritores es la forma de acercarse a la literatura entendiéndola como un material de construcción, y no como una forma de responder.

Los ochenteros comentaron que cada libro es una búsqueda distinta, cada cuento tiene un tema diferente que resulta interesante: esta puede ser la sensación de temor frente a lo volátil de la realidad, y también puede ser la desconfianza del realismo, la condición apocalíptica que pueden tomar las múltiples situaciones o la nostalgia presente en la búsqueda narrativa. Al hablar de sus gustos, los autores compartieron algunas de sus influencias musicales, en un arco que pasó por Nirvana, Radiohead, Neil Young, Leonard Cohen, Tom Waits, Nick Cave y Philip Glass. Estas recomendaciones, hechas como objetos culturales fundamentales, sirven para describir su formación como escritores y pueden ser considerados, coincidieron todos, como objetos fundamentales para el proceso creativo.

Por último, los autores extendieron al púbico una invitación a leer a sus contemporáneos como María José Navia, Mónica Ojeda, Claudia Apablaza, Mike Wilson, Romina Reyes, Paulina Flores, Camila Gutiérrez, Ave Barrera, Mariana Komiseroff, Juan Pablo Roncone, entre otros.

LOS OCHENTEROS

Carlos Manuel Álvarez (Cuba, 1989)

Ave Barrera (México, 1980)

Carol Bensimon (Brasil, 1982)

Liliana Colanzi (Bolivia, 1981)

Camila Fabbri (Argentina, 1989)

Joel Flores (México, 1984)

Carlos Fonseca (Costa Rica/ Puerto Rico, 1987)

Arnoldo Gálvez (Guatemala, 1982)

Enza García Arreaza (Venezuela, 1987)

Damián González Bertolino (Uruguay, 1980)

Camila Gutiérrez (Chile, 1985)

Mauro Libertella (Argentina, 1983)

José Adiak Montoya (Nicaragua, 1987)

Francisco Ovando (Chile, 1989)

Marcela Ribadeneira (Ecuador, 1982)

Carol Rodrigues (Brasil, 1985)

Oscar Guillermo Solano (México, 1983)

Jennifer Thorndike (Perú, 1983)

Pedro J. Acuña (México, 1986)

Fuente: (fil.com.mx)

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