La muestra está integrada por una selección de objetos de cerámica, jade, concha y piedra de diferentes estilos y temporalidades, que van del Preclásico Tardío (500 a.C.-250 d.C.) al Posclásico Tardío (1250-1527 d.C.).
Los visitantes tendrán la oportunidad de apreciar objetos de gran belleza como la máscara de jade de Calakmul y otra con forma de tortuga, cuya restauración implicó dos décadas de trabajo. Asimismo, se presenta una variada colección de figurillas de la isla de Jaina (Campeche) que muestra la riqueza de su indumentaria y una serie de esculturas que dan cuenta de las escarificaciones con las que decoraban sus cuerpos.
Mayas, el lenguaje de la belleza ha sido visitada por 298 mil 231 personas en museos mexicanos de Cancún, Quintana Roo; Villahermosa, Tabasco, y Mérida, Yucatán; así como en Beijing, China, y Berlín, Alemania. Ahora se exhibe en la ciudad de Verona, donde permanecerá hasta el 5 de marzo de 2017.
La muestra es organizada por la Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), con la curaduría de Karina Romero Blanco, a partir de las investigaciones de diversos académicos especializados en el área maya, desarrolladas de manera sistemática a lo largo de varias décadas.
El discurso museográfico está organizado en cuatro núcleos temáticos que destacan el concepto de belleza para esta milenaria civilización: El cuerpo como lienzo, El cuerpo revestido, La contraparte animal y Los cuerpos de la divinidad.
En el primer apartado están presentes las concepciones de belleza a partir de transformaciones superficiales como los tocados, pero también en aspectos profundos a través de escarificaciones y tatuajes; otro elemento que utilizaban los antiguos mayas para embellecerse fue la deformación craneal, principalmente entre las clases nobles mayas, para ello entablillaban sus cabezas con el objetivo de darle una forma de grano de maíz.
La sección El cuerpo revestido presenta la vestimenta como una forma de expresión y comunicación. En los pueblos de esta cultura había dos tipos de atuendos, unos ricamente ataviados con una especie de capas que aún perviven en la zona de Michoacán, y otros provocadores en los que hombros y pechos quedaban descubiertos.
Los vestigios textiles prehispánicos de esas prendas son escasos, pero a través de las figuras localizadas en la isla de Jaina se conoce la apariencia, variedad, diseños y temas usados; en las piezas en exhibición se observa la complejidad de la confección de las prendas y los bellos bordados, brocados y deshilados que las decoraban y que reflejaban el estatus social. 
La contraparte animal es el apartado dedicado a la cosmovisión maya de acuerdo con la cual todos los objetos, animales y plantas tenían su igual sobrenatural, era como el otro yo de las personas.
En la última sección, Los cuerpos de la divinidad, se expone la veneración que esta civilización daba a múltiples deidades y entidades sagradas que podían encarnar los poderes más grandes. Sus representaciones incluyen características humanas mezcladas con elementos animales, vegetales y otros imaginados.
La colección que integra la exposición Mayas, el lenguaje de la belleza procede de más de 20 museos de los cinco estados que comprenden el área maya en México: Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. La exposición permanecerá abierta hasta el 5 de marzo de 2017, en el Palacio de la Gran Guardia de Verona, en Italia.
Fuente: (INAH)
