“Armando Herrera. El fotógrafo de las estrellas”, de Héctor Herrera, o lo que nos dejaron el espectáculo, el cine y el deporte del siglo XX
Para mi madre, con amor y agradecimiento eternos
Por Gregorio Martínez Moctezuma
Coordinador editorial Azteca 21
Ciudad de México. 26 de febrero de 2014. Cuando uno abre el libro “Armando Herrera. El fotógrafo de las estrellas” (Fondo de Cultura Económica, México, 2009), de Héctor Herrera y con textos de él, Carlos Monsiváis y Fabrizio Mejía Madrid, es casi como si penetrara a una sala de cine vieja, enorme, quizás como la del desaparecido Cine Chapultepec, a un viaje por el tiempo a través de una serie de retratos que no sólo es una muestra del arte que hacía Armando Herrera, sino también es un testimonio único, inmejorable, de toda una época, cuando las estrellas de veras lo eran, cuando, parafraseando una frase del libro, eran tan inalcanzables y a la vez, tan semejantes a uno, a sus admiradores.