España recupera. México por la alta velocidad

Una buena pregunta que sirve de pretexto para la reflexión primordialmente cuando se analizan un cúmulo de variables endógenas y exógenas que  afectan, para bien o  mal, a la actividad turística.
Todavía tres décadas atrás la distancia geográfica era un factor preponderante al momento de decidir el país destino de las vacaciones, entonces China, era demasiado lejana.
Toda vez que,  el aprendizaje del idioma inglés, empezó a cobrar relevancia previo a los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 cuando había que atender el arribo de millones de turistas llegados de todas partes del mundo y había que elegir un canal de comunicación siendo el inglés el más generalizado.
En  lo personal siempre me ha llamado la atención el potencial turístico de España, con ETA y sin ETA,  de una u otra forma se ha sostenido  en  la lista de las preferencias de los viajeros dispuestos a descubrir cultura, historia y disfrutar la buena gastronomía y hostelería.
Prácticamente lo tiene todo y siempre va a más perfeccionándose y reinventándose para no perder atractivo.
El otro polo que me sacude es precisamente China, el gigante asiático despegó y con fuerza desde 2000, yo no dejo de admirar la forma en cómo se posicionó rápidamente en los gustos  de los viajeros internacionales.
Poco a poco China desplazó a México en cuanto a número de visitantes a tal grado  que la tierra de Mao Tse Tung se coló entre los cinco primeros países más visitados del mundo.
La distancia, el idioma, los usos y costumbres y hasta las rarezas en la alimentación cotidiana pasaron a ponerse en boga.
A COLACIÓN
Y México, ¿por qué no?  Me pregunto qué nos falta cualitativamente hablando para figurar entre los de mayor atractivo para los viajeros. A lo largo de estos días que he recorrido la Feria Internacional de Turismo (Fitur) 22 al 26 de enero, he visitado los diferentes stand de México.
Es más, si el año pasado, los autobuses de transporte público en Madrid lucieron anuncios de Veracruz mágico este año la publicidad que muestran refiere a Puerto Vallarta, Jalisco.
Pero aún poco se sabe más allá de lo negativo y del cliché  acerca de las playas de Cancún, Playa del Carmen o de visitar ciudad de México.
Por eso será que provocan envidia los datos de España en cuanto a turismo: el año pasado España logró que 60.6 millones de turistas entraran al país ibérico permitiendo con ello desplazar a China del tercer escalafón de los más visitados del mundo.
Francia continúa inamovible es el de mayor preferencia con 83 millones de llegadas seguido  por Estados Unidos con 67 millones.
Yo creo que  mucho tiene que ver no nada más que un país tenga historia, cultura, playas, gastronomía sino también infraestructura y facilidades para que el viajero internacional se desplace sin dificultades.
Por supuesto, la relación precio-calidad  cuenta y bastante más para el tema del bolsillo del viajero al momento de decidir hacia donde tomará sus próximas vacaciones.
Hace unos días, para ser más precisos el día 8 de enero pasado, llegaron a visitarme a Madrid dos personas muy cercanas y no pude más que sentir algarabía porque los mexicanos tenemos que salir a ver el mundo para comprender cuanto nos falta por avanzar.
Ellos, sin dificultad alguna, alquilaron un vehículo para recorrer España de cabo a rabo, esto es, de norte a sur, sin problema alguno.  A  los pocos días de viajar, me llamaron para comentarme del perfecto estado de las carreteras y de la ausencia de casetas de cobro precisamente cuando  están acostumbradísimos al desembolso permanente.
En par de días más volverán a México aunque yo siempre les insistí que se trasladaran en AVE, esto es, el tren de alta velocidad española que ahora conecta a Madrid con Francia en siete horas y a Barcelona con Paris en seis horas.
No cabe duda que la alta velocidad ha sido uno de los grandes aciertos en cuanto a la planificación de obras en España y se espera que pueda reactivarse el plan de la alta velocidad hacia Portugal que quedó postergado tras la crisis en ambos países.
El hecho es que la infraestructura en comunicaciones es un déficit a resarcir en México. Claudia Ruiz Massieu, titular de Turismo, nos adelantó la construcción del tren transpeninsular entre Cancún  y Mérida.
También está el tren México-Toluca, el tren México-Querétaro y recientemente se supo del tren de Monterrey-San Antonio que tendría una derrama económica muy importante igual que la del transpeninsular. La tecnología será francesa y española.

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