En torno a una taza de café comenzamos la charla con Gerardo Ventura, artista plástico.
Nace en la ciudad de México hace más de cuatro décadas, llama la atención verlo con la cabeza afeitada, la cara enmarcada con una piocha española; así como su más de 1.80 metros de estatura. La sonrisa franca, los ojos expresivos y unas manos que no dejan de moverse enmarcan su inquietud y la pasión por el arte.
Sus inicios
—Desde niño tuve facilidad para dibujar. A los cinco años copio un tótem de un folleto turístico, al ingresar a la primaria mis cuadernos los lleno de dibujos.
—En la adolescencia, una enfermedad repentina de mi padre, cambia mi vida de un día a otro.
—Por la misma época, un maestro de artes plásticas me enseña que en la pintura uno es libre para probar, decidir qué va y cómo va. Esto me ayuda a sobrellevar las largas y pesadas labores del hogar, por la noche me libero pintando.
—Poco a poco me voy interiorizando y encuentro a mi mejor yo. En muchas ocasiones las sesiones duran toda la noche, pero valen la pena.
—Después de la muerte de mi padre, destruyo gran parte de las pinturas que tenía. ¡Es una catarsis, me libera y me fortalece!
Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA)
—Comienzo a los dieciséis años a trabajar en CONACULTA en el área dedicada a la restauración, el entorno de arquitectos y de ingenieros influyen en mí para que de manera autodidacta comience a dibujar de una manera formal.
—Estando ahí, me doy cuenta que la pintura no es un pasatiempo, sino una forma de vida que me ayuda a expresarme y la retomo.
Obra
—Actualmente cuento con aproximadamente setenta y cinco obras, de las cuales un 80 por ciento son figurativas, en donde se privilegia el cuerpo, principalmente el femenino ya que para mí es erótico y reflexivo. Tengo obras con temas prehispánicos. El resto son del tipo abstracto, en la cual me inspiro en el maestro Nierman. Me gusta el acrílico por vistoso, colorido y por la intensidad que se puede lograr en las obras. En este rubro admiro a Matisse y Miró.
Pasión o técnica
—En mi obra van tomadas de la mano. No son del tipo de la obra de Jackson Pollock, pero tampoco son desarrolladas con la técnica de la escuela griega; considero que tienen lo suficiente de ambas para trasmitir un mensaje y conectar con el público.
Academia de San Carlos
—Actualmente curso un taller con la Maestra Rocío Romero. Esta es una gran oportunidad para conocer otras técnicas, formas de trabajo y sobre todo visualizar cual será mi devenir como artista.
—Uno de los objetivos es desarrollar nuevas series tanto en lo abstracto, como en lo prehispánico.
—Uno de los temas que voy a desarrollar es sobre la Ciudad de México.
Apoyos
—En México los apoyos son pocos. El maestro Manuel Felguérez dice: “No dejen de crear, pero mantengan sus otras actividades mientras logran vivir del arte”.
—La gente cuando sabe que soy artista plástico me pregunta: Y, ¿en qué trabajas?
—Vincent van Gogh en su escrito: “Cartas a Theo” subraya: “¡Claro que trabajo! Dedico dieciséis horas al día a mi pintura”.
Los medios
—En estos tiempos, el uso de la tecnología se vuelve un gran aliado para la difusión de mi obra.
—El participar en foros dónde exponemos obra de manera virtual y estar a la vista de otros artistas resulta desafiante, retador, excitante.
—Al recibir comentarios sobre mi obra ¡me hacen el día!
—Son el alimento que necesitamos para saber que vamos por el camino indicado.
—Son excelentes escaparates para que el público en general conozca mi obra y en ocasiones salen sinergias muy interesantes que abren nuevos caminos.
Exposiciones
—Me gusta exponer, es una forma de poner ante la gente mi trabajo y ver si he logrado trasmitir lo que quiero. He participado tanto en colectivas, como en individuales. Destaca la de San Miguel de Allende, Guanajuato con obras prehispánicas, ya que es un lugar donde siempre hay mucho turismo extranjero.
—En estos días expondré en la galería de Yuri López Kullins dentro del colectivo: “Los elementos”.
—Posteriormente participaré en una exposición en el Hotel del Prado.
Futuro
—Considero que ser un artista plástico es un mandato de vida.
—Estoy en el momento preciso para trascender y compartir con el mundo.
—Quiero incursionar en la escultura.
—Desarrollar series abstractas y prehispánicas. Mantener la figurativa que es la esencia.
Para terminar acota: “El arte es para todos, y está dentro de todos”.
