En conferencia de prensa, realizada la mañana de hoy en la Sala Chopin, las actrices Maya Zapata (Eva), Johanna Murillo (Lucía), la directora Katina Medina Mora y la guionista Samara Ibrahim comentaron que esta propuesta escénica abordará temas que les duelen a las mujeres contemporáneas a través de dos personas “absolutamente opuestas”.
Samara Ibrahim comentó que para la creación de la obra, las cuatro se reunieron y empezaron a hablar sobre los temas que les conflictuan no sólo como mujeres, sino como seres humanos.
“La obra es un retrato de la insatisfacción y frustración que muchas veces sentimos y que no tiene género. No se necesita ser hombre o mujer para sentirse insatisfecho, se trata de contar un poco lo que vivimos y hacer un retrato social de los seres humanos cuando tenemos y amamos, que no tiene nivel socioeconómico ni nivel sociocultural”, apuntó Ibrahim.
En la obra, Eva es una arquitecta que tuvo su momento de gloria hasta que se casó y tuvo un hijo, pues decidió dedicarse de tiempo completo a su familia, lo que aparentemente la hace feliz; por su parte Lucía es exitosa en su trabajo como diseñadora de interiores y muebles, se preocupa por su imagen y es aficionada de la moda.
“Los dos personajes son mujeres que desde sus más absolutas y profundas carencias reconocen que el amor no es suficiente. Son mujeres que se tiran al abismo sin ver el fondo y que también generan empatías en el espectador […] Hicimos una propuesta que nos gustaría estar viendo, no es una historia autobiográfica, las cuatro tenemos amigas, madres, hermanas y hombres que nos hacen ver en un espejo”, agregó la guionista.
La actriz Johanna Murillo apuntó que la obra busca generar reflexión en el espectador, y aborda el tema de la envidia, lo que es una cuestión humana.
Por su parte, Maya Zapata subrayó que la puesta de mujeres hecha por mujeres no tiene como objetivo ser aleccionadora o decir qué es correcto o no, sólo quieren hablar de lo que le pasa a las mujeres, sin hacer hincapié en algo en particular.
“Se habla de lo opuesto, el espejo, lo que está enfrente y te puede resultar atroz o mejor, lo que es el principio de la insatisfacción”.
Para la directora de la puesta en escena, Katina Medina, la obra para nada es feminista ni va contra los hombres. “Lo lindo de la obra es que presenta problemáticas individuales e insatisfacciones reales; es una propuesta en la que no hay ni ataque de género, ni violencia, sólo la que se genera de los amores no correspondidos”.
Respecto a la escenografía unidimensional que presenta la propuesta escénica, Medina explicó que fue con el fin de generar un espacio íntimo en el que se desarrolla la historia y provocar que las actrices sean lo único que destaque, tenga vida y se mueva.
La acera de enfrente se presentará del 30 de noviembre al 23 de diciembre en la Sala Chopin, ubicada en Álvaro Obregón 302-A, esquina Oaxaca, Col. Roma. Horarios: viernes 20:30, sábados 19:00 y domingos 18:00 horas. Localidades: 250 pesos. Venta de boletos en la taquilla del lugar y en el sistema TicketMaster.
Fuente: (CONACULTA)
