Excelente encierro de Marrón en la quinta novillada en “La México”; sólo Mirafuentes de Anda cortó una oreja

Alejandro Lopez (obispo y oro) abrió el festejo con Huracán, número 930, negro bragado y cornidelantero con 385 kilos, verónicas sin pararle, rematadas con media; quitó por navarras, ahora sí, del gusto del tendido. Le brindó al cónclave capitalino que hizo la entrada de costumbre, para trastearlo por el pitón derecho siendo molestado por el vendaval que soplaba en ese momento, refugiándose en las tablas y con la toledana, dos estocadas con un aviso entreverado, pinchazo y descabello para escuchar sepulcral silencio y aplausos al de Marrón, así como a todos sus hermanos .

El cuarto fue Coronado, numero 878, cárdeno claro nevado bragado meano y cornidelantero tocado del derecho con 435 kilos, lo recibió con chicuelinas en la boca de riego y lo quitó del caballo por gaoneras. Inició su faena con un trasteo cascabelero, dejando la muleta muerta ante el repudio del tendido y mejoró con el acero al dejar un pinchazo y estocada para escuchar aplausos.

Xavier Gallardo (grana y oro) con Ventanero, numero 899, zaino y capacho con 465 kilos, farol de hinojos y horribles espantadas brincando la barrera. Tumbó el bravo novillo al varilarguero  Juan González y con la muleta, un trasteo, del tercio los medios y ahí, derechazos con fuerte eco en el tendido y otra serie más con la siniestra, adornándose con manoletinas en la puerta de arrastre, finiquitando su labor con un pinchazo y estocada para escuchar silencio.

Con Cerralvo, numero 907, cárdeno claro salpicado bragado meano y bien puesto con 450 kilos, poco que comentar con el percal y en el tercer tercio, una faena con muletazos por ambos pitones y con la toledana, un metisaca, dos pinchazos y estocada para escuchar aplausos.

Mirafuentes de Anda (Burdeos y oro) con Candelero, numero 929, cárdeno claro nevado bragado meano caribelllo y cornidelantero tocado del derecho con 380 kilos, verónicas, rematadas con una luminosa revolera. El banderillero Sergio González enorme con los garapullos, desmonterándose en el tercio. Se embraguetó con el novillo en tablas con sentidas tandas de naturales y lo finiquitó de una estocada hasta los gavilanes para cortar una merecida oreja que le otorgó el juez de plaza Don Jorge Ramos Sandoval y le entregó el alguacililllo José Julián Ayala.

Cerró el festejo con Danzante, numero 876, negro bragado y cornivuelto con 430 kilos, lo veroniqueó con sentimiento y le brindó su trasteo a sus señores padres. Faena con un revolcón sin consecuencias que lamentar y un trasteo en la contraquerencia, buscándole las embestidas al cornupeta. Se fue tras el acero, dejando un pinchazo y una estocada caída para escuchar las últimas palmas de la afición capitalina.

‘La Fiesta Brava, Valor, Técnica y  Sentímiento’

Visita www.suertematador.com

Enviado desde mi oficina movil iPod Apple

Foto: Edmundo Toca

Leave a Reply