Con asistencia de siete mil personas, en su mayoría mujeres de edad madura, la cantante las mantuvo entretenidas este sábado para recargarles el gusto por el reclamo contra una cultura machista.
La nacida el 4 de abril en Alto Lucero, Veracruz, Francisca Viveros Barradas, y quien recién cumplió 40 años de carrera artística, cantó en dos horas más de 30 temas, la mayoría sus grandes éxitos.
También interpretó algunos de los temas de su nuevo CD como “Vivo contenta”, con el que abrió su concierto, además de “Dale de comer al gato”, “Chango viejo” y “Exceso de calcio”, en los que ridiculiza al hombre.
Recibida como “La protectora de las mujeres”, la casada dos veces, engañada en la primera y viuda en la segunda, se ratificó aquí con una fórmula ganadora de criticar al hombre abusivo en su relación con su pareja.
Su actuación contó con dos grupos norteño y mariachi, además de un permanente acordeón y fue reforzado por imágenes de la cantante con dos enormes pantallas y una al centro.
Con modestos efectos de luces, la intérprete siempre fue el centro de la atención y se dio el lujo de cambiar de vestuario pero con su estilo de siempre y su cabello con copete engolado.
Con eso le bastó para provocar aplausos y gritos de apoyo y admiración para quien ha generado que una expresión se le haya adherido como marca registrada y que ésta vez expresó en una docena en ocasiones.
De forma mágica, “!Me estás oyendo inútil!” aderezó sus canciones en donde critica al hombre, al machismo y a acciones abusivas de los varones en contra de sufridas mujeres.
La cantante surgida de cantinas en el centro de México hizo transportar a su público asistente, a una catarsis de humillación al género y con permanente empleo de metáforas.
Así con su recorrido musical interpretó éxitos como “Invitame a pecar”, “Tu no tienes madre”, “Me saludas a la tuya”, “Resulto vegetariano”, “Tu última parada”, “Taco placero”, “Tres veces te engañé” y “Rata de dos patas”.
Sin la habitual presentación y discursos de agradecimiento que acostumbran los artistas, Paquita se dedicó a cantar y sólo hacia pequeñas observaciones algunas pícaras, que recibían gritos y expresiones de afirmación.
En la retahila pasó desde hipócrita; perverso; me trataste peor que a mis calzones; no disparabas tu pistolita; todo lo tienes chiquito; te saque de la basura; o se componen o los capamos; bueno para nada!
El concierto lo inició la debutante B.A. Solís, hija de Marco Antonio Solís y Beatriz Adriana, y quien cantó rancheras, cumbia norteña y pop, en lo que es una búsqueda por definir su género.
Fuente: (Notimex)
