Presentan en Bellas Artes el libro “Morir todos los días” del poeta, ensayista y dramaturgo, Vicente Quirarte

académico mexicano ofrece una prosa diáfana que redunda en una lectura placentera, para explorar los embrollos a los que puede arrojar al ser humano la paradoja de ‘Morir todos los días’.  

En el acto, María Emilia Chávez Lara, Jesús Francisco Conde de Arriaga y Carlos Pellicer López, coincidieron en que la obra tiene como eje temático el deseo de amar aunque en ninguno de los relatos se consagra.  

El amor en los personajes de Quirarte está marcado por la necesidad de unirse a otro ser a través de la transgresión o de la pasión desatada, destacaron.  

En este trabajo, coincidieron, el poeta, ensayista y dramaturgo permite al lector vislumbrar los claroscuros que emanan de la fuerza del sentimiento más grande entre los seres humanos: el amor.  

Al tomar la palabra, Emilia Chávez recordó con cariño a quien fuera su maestro en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, al tiempo que elogió brevemente la obra literaria del también miembro de la Academia Mexicana de la Lengua (AML).  

Recordó a Quirarte como ‘un inmortal’ en una novela vampiros, donde dijo, ‘Vicente me enseñó a amar lo extraño, a los hombres lobo, a piratas y a la Ciudad de México’.  

Sobre el texto presentado, sostuvo que se trata de una publicación que la conmueve y que es especial por la cantidad de personajes que se presentan y por la forma como su autor los expone.  

Tras expresar su admiración por Quirarte, Chávez indicó que gracias a él, se acerco a la literatura de Gilberto Owen, quien, dijo, ‘se convirtió en uno de mis poetas predilectos’.  

‘La obra que hoy nos convoca es un libro de naufragios, porque al final, la vida no es más que un naufragio. Quirarte nos muestra el peligro que hay en el vivir y más aún el peligro que hay en el amor, de aproximarnos a esa isla que es el otro y al que quisiéramos conquistar’, dijo.  

Al respecto, Conde de Arriaga afirmó que ‘Morir todos los días’ toma su título de un verso del poeta tabasqueño Carlos Pellicer, pues como ha dicho el mismo Quirarte, quien también es autor de varios libros de poesía, los nombres de sus libros surgen de sus propias lecturas, de las pasiones que le provocan otros autores.  

Así, en el primero de los epígrafes que abren el libro puede leerse el verso de Carlos Pellicer, que dice: ‘Al año de morir todos los días / los frutos de mi voz dijeron tanto / y tan calladamente, que unos días / vivieron a la sombra de aquel canto’.  

Dijo que los versos que sirven de insignia al libro anuncian el tema amoroso como una de las preocupaciones centrales de los relatos que componen la obra, ‘así, cuando el propio autor habla sobre el significado de los textos, explica la importancia del tema amoroso en su texto’.  

En la obra de Quirarte, los protagonistas de los cuentos van desde un adolescente que se enamora de su prima y descubren juntos la ciudad, hasta un joven que disfruta correr para conocer su cuerpo.  

Otro de los elementos que unifican los relatos de ‘Morir todos los días’, cuya presentación dedicó Quirarte al recién fallecido editor Enrique Romo, es la ciudad como testimonio de una época y del fervor del autor.  

Las historias amorosas de los personajes se desarrollan en la ciudad. Los adolescentes que visitan el Museo del Chopo; un fotógrafo que se enamora de una modelo y la visita en la ciudad de Nueva York; la relación amorosa de una mujer casada que transcurre en Roma, Ravenna y Venecia.  

Al respecto, el escritor, pintor y luchador social Carlos Pellicer López opinó que el tema amoroso como eje temático hace que los protagonistas de ‘Morir todos los días’ vivan en situaciones límite, a donde son llevados por la fuerza incontenible del amor, sin importar si éste es vivido con inocencia, ternura y desencanto, o, en el otro extremo, con pasión y erotismo salvaje.  

El también sobrino del autor del mismo nombre, indicó que en esta serie de relatos, Quirarte ‘nos hace cómplices de la lectura’.  

‘Es eso lo más lindo que nos deja un texto cuando nos hace cómplices, nos sentimos como que estamos compartiendo un secreto, y como todos estos cuentos son amorosos, que nos cuenten un secreto de amor y que nos los cuenten tan bien como lo hace Vicente, representa un lujo de lectura’, dijo.  

Tras la presentación, la actriz Elena de Haro realizó una lectura de la obra, bajo la dirección de Eduardo Ruiz Saviñón.  

Fuente: (CONACULTA)

Leave a Reply