Décima Musa.
Con motivo del ciclo “Entrevistas presenciales: La novela histórica: entre la ficción y la realidad”, que se llevó a cabo en el Recinto de Homenaje a Don Benito Juárez en el Palacio Nacional, la narradora comentó que el interés por la historia nació a partir de una búsqueda en la investigación.
Sobre Sor Juan Inés de la Cruz, apuntó que le interesó curiosamente, aunque se escuche algo serio, fue por encargo de una amiga, la gastrónoma Ana Benítez, quien coordinaba la colección Cocina Virreinal en el 2000.
“Mi amiga me invitó a que escribiera un texto que acompañara al recetario que se encontró en el convento de San Jerónimo, y que se le atribuye a Sor Juana, para adaptarlo a técnicas de cocina”, recordó.
Fue así, dijo, que mí primer enfrentamiento no fue con la Sor Juana poeta, dramaturga o intelectual, sino con la Sor Juan frente al fogón.
Apuntó que eso le hizo leer sobre Sor Juana, su vida y su familia, encontrar varias lecturas que ‘me abrieron el apetito de escribir una novela sobre ella’.
Yo, la peor apresa el espíritu de una época y la difícil vocación por el estudio y el conocimiento de una mujer talentosa, sin dote ni padre, donde influencias, alianzas e intereses tejen un desatibo singular con la palabra en el seno de las contradicciones barrocas, a la par que desnuda los destinos de una constelación de mujeres presas de las circunstancias de su pertenencia.
Fuente: (Notimex)
