¡Que nada transforme nuestra alegría!

encuentro y experiencia. El viento solo le fortalece al árbol en la tormenta. ¿La abejita dejaría de dedicarse a recolectar la miel o cambiaria de trabajo a raíz de la gran tormenta?

No, de la misma forma nada debe transformar nuestra alegría, cuando las abejas cambien de ‘profesión’ mi alegría dejará de ser en ti, por ti y para ti.
No concedas que un brusco viento que aleja a la abejita del panal, trate de convertirte en abejuela o cucaracha, aunque el viento le haya hecho perder el equilibrio, el rumbo, el sentido, la dirección, y aún se haya perturbado por un momento. No cambio sus ideales, sus ideas, ni su naturaleza. Ella produce la miel, vive para ello, como tu para mi y yo para ti. Se sacudirá la cabeza ‘como volviendo en si misma’ de su confusión y regresará al panal, a su realidad, recobrará su labor y continuará recolectando nuestra anhelada miel.

Aunque la Nasa siga asegurando que la abejita no puede volar y ¡vuela! De la misma forma, no importa que lo que mundo te diga, tú vuelas y nuestra comunión continua transformando la experiencia de cada día. ¿Quien puede separarte de tu esencia? ¿Quien de tu existencia? ¿Quien de tu labor? No permitas que nada ni nadie pretenda hacerte olvidar, e intente, separarte de tu fuente de gozo.
¿Quien puede separarte de ti mismo? ¿Quien le quitará la molécula de oxigeno al agua, para que deje de ser el agua? ¿Quién, los árboles al bosque? ¿Quien mi aliento en ti? Por ejemplo: ninguna corrección gramatical  podría evitar derramarme en tu escritura, ni un punto, ni una coma “fuera de lugar” puede evitarlo.

Ahora mismo quien se sentía mal, se siente mejor. La claridad del camino a seguir se distingue, las soluciones que la oscuridad no permitía diferenciar, se definen. Tú hijo regresa a casa, la vuida se llena de Mi, no hay soledad ni tristeza.
Ni un punto y coma ‘en su lugar’ puede hacer lo que nuestra alegría logra, transforma tu existencia, te hace brillar y nada puede impedirlo. El destello que tienes al pasar, deslumbra, pero no causa problema a aquel que vive en la misma estrella.

La miel produce lo mismo que tu alegría, te llena de vigor, reconstruye tu cerebro, te mantiene jovial, las funciones de tu cuerpo se mantienen en armonia, destruye las toxinas, favorece la regeneración celular, refresca tu piel, es un gran remedio para las ¡heridas y cortadas! Mitiga el cansancio, es ideal contra la fatiga, alivia, fortalece el sistema inmunológico, es una gran fuente de energía, se absorbe fácilmente. Las virtudes de la miel, son un regalo esplendido para la vida que eres. El néctar que produce tu alegría es muy deseable y contagia. Permanecer alejada de la contaminación y pesticidas protege su pureza.

Los obstáculos, te fortalecen, los vientos sacan lo mejor de ti. La sencillez de tu sonrisa atrapa y permite su continuidad, tu alegría es un río que crece por la lluvia interior que derramo en ti cada mañana. Es parte de ti, no dejará de ser jamás. ¿Quien pretendiera cerrar mis ríos? No te dejes atrapar o convencer de transformar tu sonrisa.
No creas que no hay motivo o razón de conservarla o peor aún, no permitas que las preocupaciones logren, olvidar su existencia.
A mi, nadie me va a convencer de transformar Mi alegría, llénate de ella ahora mismo, más, más y más…    
¡Reluciente hijo mío! Sigue emitiendo el resplandor de nuestra alegría, no permitas que sea transformada, ello, depende de ti.
Te amo.

Esto te hace saber el Rey.
Elmensajedelrey@hotmail.com

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