“El baile de San Juan”, cinta que muestra a “La Colonia” como el “momento” en el que surgió la nación mexicana

nación y que si no lo aceptamos así, nos seguirá costando mucho trabajo entender porqué somos como somos.

El baile de San Juan, una coproducción entre compañías productoras de México, España, Francia y Alemania, Conaculta Cine, a través de Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine) y el Fondo para la Producción de Calidad (Foprocine), será estrenada en cines a nivel nacional el próximo viernes 8 de abril.

La película plantea una historia que se desarrolla en México a finales del siglo XVIII, una ciudad habitada por nativos, criollos, mestizos y extranjeros, quienes se desenvuelven en medio de amores y desamores, intrigas cortesanas y reivindicaciones populares, dogmas virreinales y sueños libertarios, tradiciones indígenas y normas de la iglesia.

Francisco Athié, quien también es guionista y productor de la película, contó que en términos geográficos, este filme es un homenaje a la Ciudad de México de esa época, la cual estaba constituida por lo que hoy conocemos como el Centro Histórico.

El cineasta recordó que la idea de contar esta historia surgió en el año 2004, cuando se encontraba caminando por el Centro Histórico de la Ciudad de México y entró en el Palacio de la Inquisición y vio a unos albañiles trabajando en un arco. “Como me pareció muy interesante el edificio, recurrí a varias fuentes y descubrí en las actas que a finales del siglo XVIII ese mismo arco estaba siendo reparado exactamente en el mismo lugar. Ahí empecé a reflexionar sobre la continuidad de la historia mexicana.

“Empecé a trabajar en ese asunto y en el año 2008 empezamos a filmar. Pero una producción de ese tamaño estaba condenada a enfrentarse con dificultades financieras debido a que es necesario tener una investigación profunda y un amplio reparto. Cuando se abrió el Fideicomiso del Bicentenario, como productora nos dimos cuenta de que si accedíamos a esos recursos podríamos hacer una película de mucha mayor envergadura y ambición. Aplicamos para ese apoyo presentando 25 minutos ya filmados, se aceptó y así continuamos haciendo el rodaje ya no dentro de una pequeña escala sino que creció en tamaño respetando la misma historia. Sin embargo, nunca fue uno de los proyectos encarrilados para estrenarse entre septiembre y noviembre del 2010”, señaló Athié.

El baile de San Juan es una película que cuenta con un reparto internacional integrado por actores y actrices como Marcello Marzarella (Italia), José María de Tavira (México), Cassandra Ciangherotti (México), Arielle Dombasle (Francia), Alberto González (España), Pedro Armendáriz (México), Antonio Rupérez (España), Pablo Paz (España), Edna Necoechea (México), Jean-Michel Noirey (Francia) y Roberto Sosa (México), entre otros.

“Es una película que siempre planteé no para celebrar la historia, sino para darnos un piso. Yo creo que hemos perdido la noción de que a finales de la Colonia se estableció el origen de lo que hoy es México, es decir, todo el mosaico que constituye nuestra nación se dio en ese momento: la mezcla de los europeos con los indígenas y los esclavos africanos, así como la mezcla de idiomas que había. Yo traté de reproducir todo eso.

“El error es que hemos olvidado el periodo de la Colonia y pensar que vamos de la Conquista a la Independencia y luego a la Revolución y al México moderno. Nos brincamos 300 años de historia como si no hubieran existido y por lo tanto nos cuesta mucho trabajo entender porqué somos como somos. Casi cualquier cosa de las que suceden ahora, yo podría hacerles una referencia, basado en mi investigación, de cómo sucedía en la época de la Colonia”, expresó el director.

Apoyado en que existe una amplia documentación histórica sobre la segunda mitad del siglo XVIII, Francisco Athié llevó a cabo una profunda investigación que le llevó tres años para documentar su largometraje. Uno de sus propósitos fue mostrar que ya desde esa época había una civilización importante en esta región. “Existe la idea fuera de México de que no había una civilización moderna, por así decirlo, sino hasta entrado el siglo XX. La labor de los cineastas es mostrar que no era así”.

“También quiero destacar que es una película muy sensual gracias a que la mayoría de los actores de la película, cada uno en su tipo físico, son espectacularmente guapos. Todos ellos corresponden a lo que yo llamo una belleza humana, que no tiene nada que ver con el exterior, sino con la pasión por vivir”, dijo.

Según el director, para la realización de El baile de San Juan se invirtieron cuatro millones de euros, cantidad que, aseguró, es muy baja si se considera que el 60 por ciento de los objetos que se utilizaron en la película tienen valor histórico, como vestuario, obra artística y objetos de uso cotidiano.
MAC

Fuente: (CONACULTA)

 

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