Orejas y rabo para “El Juli” que pone de cabeza la Monumental de Insurgentes; “Zotoluco” una oreja por toro

su primero, al tercio en su segundo y las orejas y el rabo en uno de regalo y Octavio García El Payo, silencio en sus dos toros ante un desigual lote de Xajay.

Al final del paseíllo se rindió un minuto de aplusos en memoria del matador de toros José María Luévano.

Abrió el festejo Eulalio López El Zotoluco (tabaco y oro) celebrando el capitalino su corrida número mil, con Avellanito, número 223, cárdeno girón bragado meano y cornidelantero vuelto con 510 kilos, al cual bregó aseadamente del tercio a los medios; con la pañosa, naturales en la puerta de arrastre, un molinete y derechazos en el mismo tenor; volvió a la siniestra y ya no conectó con el tendido por lo cual volvió a la diestra para ser aplaudido, abaniqueo por la cara y certera estocada para cortar una oreja que le concedió el juez de plaza Roberto Andrade y le entregó el licenciado Arturo Ramos.

El cuarto fué Pa`Luévano, número 266, entrepelado bragado y cornivuelto con 490 kilos al cual recibió con un farol de hinójos en tablas y de pie, verónicas, no se animó a hacer un quite. Con la pañosa, doblones en el tercio y derechazos en el mismo sitio, intentó al natural pero desistió para volver a muletear con la diestra en la puerta de arrastre; nuevamente mató certeramente para cortar otra oreja y ganarse la salida por la puerta grande.

Julián López El Juli (azul rey y oro) con Palomo Rojo, número 314, castaño bragado ojinegro rebarbo y bien puesto con 505 kilos, mandiles de recibo, bregó hacia el caballo y quitó por chicuelinas. El banderillero Francisco Acosta Paquiro fué cogido recibiendo una cornada de quince centimetros en el costado y golpes en el rostro. Le brindó al cónclave para hacer una faena con doblones y derechazos en el tercio coronada con una estocada para cortar una oreja que le fué entregada por el doctor Saúl Rivera.

El quinto fué Mil Tardes, número 324, entrepelado bragado meano y brocho con 485 kilos, al cual recibió con ajustados mandiles y quitó por chicuelinas entreveradas con tafalleras. Con la pañosa: un péndulo, un derechazo y una dosantina; se fué a la boca de riego para correr la mano en derechazos y un cambiado de cartél; intentó al natural ya no en el mismo tenor por lo cual volvió a la diestra que era el pitón más potable para deletrear dos derechazos, una aterciopelada dosantina, un trincherazo y otra serie de derechazos al grito de “!torero, torero¡”, adornos por la cara y fatal con la toledana: cuatro pinchazos y estocada para perder la puerta grande, pero como no quería que se le fuera El Zotoluco por delante regaló un séptimo: Guapetón, número 317, cárdeno claro bragado y capacho con 515 kilos, un toro que traía las orejas con alfileres y que El Juli aprovechó para hacerle una faena con muletazos de todas marcas a la pastueña embestida del queretano, petición de indulto y estocada para que Roberto Andrade le concediera las orejas y el rabo y se les entregara el doctor Rivera.

De noche pasó por la Monumental, Octavio García El Payo (azabache y oro) con Mata Cuervos, número 221, entrepelado listón bragado y cornidelantero montado con 485 kilos, verónicas con el percal y con la pañosa, una faena en la contraquerencia molestado por el viento, media estocada y pitos al toro en el arrastre y silencio para el torero.

El sexto fué Media Luna, número 280, negro bragado lucero y caribello con 530 kilos, capotazos y con la muleta, derechazos hasta que fué cogido en la querencia sin consecuencias que lamentar, volvió a la cara del burel para dar naturales sin dejar quietos los pies en la arena por lo que cortó por lo sano dejando una estocada para escuchar sepulcral silencio.

Al final El Zotoluco y El Juli salieron en hombros por la puerta grande de la Monumental Plaza de Toros México y todo ha quedado listo para las corridas de aniversario del sábado 5 y el lunes 7 de febrero.

La Fiesta Brava, Valor, Técnica y Sentimiento.

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Toros en la México.

Foto: Cortesía Manolo Briones

 

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