Exposición “Tápame con tu rebozo”, mostrará joyas textiles de San Luis Potosí, Michoacán, Oaxaca y el Estado de México

rebozar, que significa “cubrir o tapar el cuerpo”.

A la forma de la tilma o manta prehispánica se le agregó el terminado de los extremos, conocido como rapacejo o empuntado de los flecos.

El nombre de rebozo se aplicaba indistintamente para la mantilla o paño que se usaba en la cabeza, al que también se le llamaba “chal”, como sinónimo. En realidad “chal” es la contracción de la palabra “chalina”, nombre que en España recibían los lienzos delgados de un solo color, más cortos que un rebozo normal y sin rapacejo.

Hasta finales del siglo XVIII el rebozo se había establecido como una prenda indispensable y tradicional en la Nueva España, tanto, que existen evidencias de pedidos especiales de rebozos entre cuyos ejemplares había algunos que incluían hilos de oro o de plata en su hechura.

Para el siglo XX, el rebozo de algodón era una prenda de uso popular, inmortalizado por las famosas “adelitas”, presentes en la Revolución Mexicana; mientras que el rebozo de seda era altamente cotizado entre las mujeres de los estratos económicos altos.

Una muestra de esta prenda tradicional se podrá apreciar en la exposición Tápame con tu rebozo, que se presentará a partir del 9 de septiembre en el Museo Nacional de Culturas Populares y permanecerá hasta el 12 de octubre del año en curso.

La exhibición está integrada por piezas de San Luis Potosí, Michoacán, Oaxaca y Estado de México, y pertenecen al acervo de la Dirección de Desarrollo Artesanal de San Luis Potosí, que a través de los concursos nacionales que realizan cada año, ha logrado conformar un valioso muestrario de los rebozos del país, con piezas que han sido merecedoras de diversos premios, en reconocimiento a las técnicas antiguas de teñido, tejido y los diseños tradicionales.

Fuente: (CONACULTA)

Leave a Reply