Espectacular crisol de bailes típicos ejecutados magistralmente por el Ballet Folclórico de Amalia Hernández

el Teatro Diana, donde logró reunir a aproximadamente dos mil personas.

Bastaron siete piezas coreográficas para que la agrupación fundada en 1952 en la Ciudad de México cautivara las miradas y admiración de los asistentes. Para algunos, por ver al que se considera el mejor grupo de ballet de México, la espera pareció eterna, pero al final valió la pena, al ver un espectáculo que recoge un poco de cada región del territorio nacional, presentando así un crisol de bailes típicos, acompañados en algunas ocasiones por la música en vivo.

Entre músicos y bailarines, sobre el escenario sumaron aproximadamente 100 elementos, ya que para cerrar la noche con el cuadro dancístico Fiesta Jalisco, los mariachis Estrella de México y el Vargas de Tecalitlán aportaron lo suyo para concluir una noche redonda, en una de las mejores galas que se han visto en la presente edición del encuentro de la música popular mexicana.

Matachines, Guerrero, Revolución, Veracruz, Juegos y Danza del venado, fueron las piezas coreográficas con las que se celebraron las tradiciones mexicanas.

Posterior al intermedio y previo a la presentación del Ballet Folclórico de Amalia Hernández, Salvador López —nieto de la directora y coreógrafa— recibió de manos del presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Miguel Alfaro Aranguren, y del secretario general de Gobierno, Fernando Guzmán Pérez Peláez, el reconocimiento más importante que se entrega en el marco del Encuentro Internacional del Mariachi, la presea Silvestre Vargas.

El reconocimiento, dijo Salvador López, actual director de la compañía, “lo recibo con mucho honor, en este bello escenario, y que han visto y celebrado con nosotros más de 30 millones de espectadores alrededor del mundo con las tradiciones y colorido de nuestro México”.

La espera valió la pena

Pasadas las 20:00 horas, el Mariachi Estrella de México, con apenas dos años de formación, dio muestra de por qué fue considerado para formar parte de una gala, con su calidad interpretativa vocal y musical, y los arreglos para las composiciones que fueron del bolero a la ranchera, rindiendo dos homenajes, el primero a Juan Sáizar, con el tema El gavilán, y el segundo y último al cantautor venezolano Ricardo Montaner, haciendo un popurrí de sus más reconocidos temas.

Por último, para concluir su presentación brindaron un tema de su propia autoría, Bicentenario, para celebrar los 200 años de libertad y surgimiento de la nación mexicana, el cual fue bien recibido por los asistentes, que en su mayoría fue representada por adultos.

En segundo turno salió el mariachi Vargas de Tecalitlán, considerado la mejor agrupación de música vernácula del mundo y que llegó a compartir escenario con Lola Beltrán y Rocío Dúrcal.

En esta ocasión, el homenaje fue para Roberto Cantoral, cantautor mexicano recientemente fallecido, por quien brindaron con Crucifijo y enseguida dieron rienda suelta a composiciones de José Alfredo Jiménez y Juan Gabriel, temas que fueron bastante celebrados por el público.

Fuente: (Informador)

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