Analizan pros y contras en “El sacrificio humano en la tradición religiosa mesoamericana”

bárbaros de esta práctica.

La mejor manera de erradicar tales posturas es enfocar el sacrificio desde perspectivas científicas y analizarlo con la ayuda de diversas disciplinas del saber, con rigor y calidad intelectual; bajo esta idea salió a luz un libro editado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y la UNAM: El sacrificio humano en la tradición religiosa mesoamericana.

Coordinado por Leonardo López Luján y Guilhem Olivier, investigadores del INAH y la UNAM, respectivamente, esta obra de 597 páginas presenta en cinco apartados los resultados de diversas investigaciones en distintas áreas sobre esta polémica actividad prehispánica, presentados originalmente en el marco de un seminario realizado por la Coordinación Nacional de Arqueología del INAH para debatir nuevas perspectivas científicas sobre las inmolaciones.

De acuerdo con Alicia Mayer, directora del Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM, “las funciones y significados del sacrificio humano son numerosos y varían según los participantes y contextos rituales; este acontecimiento ya no se puede reducir a interpretaciones unívocas y es necesario analizarlo en el marco de sus distintos contextos históricos”.

En ese sentido, los trabajos reunidos en la obra recién publicada “permitirán acercamientos más precisos y matizados sobre un proceso ritual fundamental para un mejor conocimiento de la cosmovisión mesoamericana”, advierte la titular del IIH, instancia a través de la cual la UNAM fue partícipe de este trabajo editorial.

Una de las intenciones de la obra es dar cuenta de las múltiples expresiones de este fenómeno en geografías distintas y épocas diferentes, incluyendo información de algunas sociedades indígenas del México actual. Así mismo enfoca el tema desde ópticas distintas, reuniendo y confrontando las investigaciones de arqueólogos, antropólogos físicos, biólogos, historiadores de las religiones y etnólogos.

Entre los especialistas que aportan sus conocimientos al corpus están Eduardo Matos Moctezuma, quien presenta una semblanza de lo que ha sido el sacrificio humano en las culturas de la antigüedad, haciendo énfasis en las mesoamericanas y los tipos de sacrificio que practicaban éstas.

Saburo Sugiyama, arqueólogo que realizó importantes exploraciones en la Pirámide la Luna, en Teotihuacan, aporta sus conocimientos sobre los sacrificios en los edificios principales de esa ciudad; Vera Tiesler y Andrea Cucina se refieren a la práctica entre los mayas peninsulares; Salvador Guilliem, ofrece los contextos sacrificiales de México-Tlatelolco.

Dos antropólogas físicas de gran experiencia, Carmen Pijoan y Josefina Mancilla, dan información sobre evidencias rituales en cuerpos sacrificados; Johannes Neurath refiere las prácticas huicholas; Yolotl González explora el ámbito del poder y la sumisión en el sacrificio, desde la perspectiva de la antropología social.

En total son 28 especialistas adscritos a instituciones científicas de México, Estados Unidos, Francia, Bélgica y Japón, quienes ofrecen una mirada renovada del sacrificio humano, a través del desarrollo de nuevas teorías, la revisión creativa de los datos históricos e iconográficos, la información arqueológica más reciente y el estudio comparativo de este fenómeno en sociedades pertenecientes a distintas épocas.

Fuente: (INAH)

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