la SalaXavier Villaurrutia del Centro Cultural del Bosque de INBA-Conaculta, la obra Más pequeños que el Guggenheim, propuesta con la que el dramaturgo y director Alejandro Ricaño, originario de Xalapa, Veracruz, ganó el Premio Nacional de Dramaturgia 2008.
La obra se presenta del 13 de agosto al 5 de septiembre como parte del proyecto que la Coordinación Nacional de Teatro ha respaldado para dar espacios a las compañías del interior de la República.
En conferencia de prensa previa a la función de estreno, Alejandro Ricaño dijo que la compañía que dirige apuesta por la descentralización del arte y bajo ese espíritu fue que se realizó esta propuesta que explora novedosos caminos dramáticos, temáticos y escénicos.
“Somos de Xalapa, egresados de la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana y tuvimos la fortuna de estrenar este montaje hace un año en la Muestra Nacional de Dramaturgia y de haber recorrido numerosos festivales de México y el extranjero. Para nosotros la Sala Xavier Villaurrutia es uno de los foros más reconocidos del panorama escénico”, expuso Alejandro Ricaño.
Por su parte, Saúl Meléndez, representante de la Coordinación Nacional de Teatro, señaló que la obra es una de esas propuestas escénicas surgidas en el interior de la República que por su calidad no podían dejar de ser vistas en otras ciudades como el Distrito Federal.
“Es una obra que ha causado una gran impresión en los foros donde se ha presentado y que ejemplifica lo que está haciendo el teatro contemporáneo en una visión céntrica, fuera de toda corriente geopolítica, que antaño fue tan importante en el panorama del arte en nuestro país. Para nosotros tener una temporada de este tipo de teatro es una conquista de algo que se había abandonado y que sin duda será de gran riqueza para el público”, destacó Saúl Meléndez.
En la obra participan los actores Adrián Vázquez, Austin Morgan, Hamlet Ramírez y Rodrigo Hernández, quienes en opinión del director, logran en escena el equilibrio perfecto para mostrar una reflexión sobre el fracaso en nuestra sociedad, además del poder de la amistad para hacer que las personas lleven lo mejor que puedan los obstáculos de la vida.
“Esta podría ser la biografía de cualquiera”, afirmó Ricaño, quien logra en escena una dirección eficiente con un trazo limpio delinear la acción de los personajes, cuya historia comienza con Sunday y Gorka quienes viajan a Europa para probar suerte en el teatro, situación que se convierte en un rotundo fracaso”.
El público celebró el humor de los diálogos y las transiciones de tiempo para ver el desarrollo emocional de los personajes, quienes se dejan de ver durante diez años y cuando vuelven a reunirse ven en el teatro una manera de combatir su soledad.
A su empresa se unen un albino bizco llamado Al y el cajero de un mini super que responde al glorioso nombre de Jamblet. Entre los cuatro comienzan el montaje de una obra que se convertirá a la larga en un barco rompehielos para surcar las regiones más frías e inhóspitas del mundo.
“Es una obra que habla sobre los sueños rotos, pero también de quienes están dispuestos a luchar por ellos hasta el final, reconociendo en ellos la única manera de encontrarse a sí mismos”, concluyó Alejandro Ricaño.
Más pequeños que el Guggenheim se presenta hasta el 5 de septiembre en la Sala Xavier Villaurrutia del Centro Cultural del Bosque. Viernes a las 20:00 horas, sábados a las 19:00 horas y domingos a las 18:00 horas.
HBL
Fuente: (CONACULTA)
