Murió Teresa Pomar, promotora del arte popular mexicano

arte popular mexicano en las últimas décadas.

María Teresa Pomar Aguilar nació en Guanajuato, Guanajuato, en 1919, fue presidenta de POPULART, organismo encargado de la creación del Museo de Arte Popular (MAP), y dirigió el Museo Universitario de Arte Popular “María Teresa Pomar” de la ciudad de Colima. También fue asesora del programa “Grandes Maestros del Arte Popular”, del Fomento Cultural Banamex, y del Instituto Nacional Indigenista, en el área de Colecciones y Patrimonio del Arte Popular Indígena.

Asimismo, asesoró en montaje de exposiciones y adquisición de objetos de arte popular a República Dominicana, Venezuela, Puerto Rico, Nicaragua, Italia y Estados Unidos. Fue curadora de múltiples exposiciones, nacionales e internacionales, realizó trabajo comunitario en los estados de México, Jalisco, Michoacán, Oaxaca, Zacatecas y muchos otros, con el firme propósito de fortalecer, rescatar y preservar técnicas y conocimientos ancestrales, así como la promoción de concursos para la apertura de mercado y la difusión de la obra de los artesanos tradicionales.

Pomar Aguilar dictó conferencias, fue jurado en concursos, colaboradora en varias revistas y asesora en la publicación de libros. Entre los suyos están “Lo efímero y lo eterno del arte popular”, “Acerca del arte popular mexicano y michoacano”, “Indumentaria tradicional”.

Recibió diversos premios, entre ellos las preseas “Miguel Othón de Mendizábal”, del Instituto Nacional de Antropología e Historia; “Manuel Gamio”, otorgada por el Instituto Nacional Indigenista, y la “Diego Rivera” por parte del Congreso del Estado de Guanajuato. También obtuvo el “IV Premio a la Excelencia de lo Nuestro” de la Fundación México Unido en sus Valores Culturales.

En Zacatecas, Teresa Pomar alentó la creación de las bases para el estudio y promoción de las artesanías a través del IDEAZ. Recorrió muchos municipios de este estado y halagó el trabajo de los talabarteros de Jerez, de los hábiles tejedores de carrizo en Jiménez del Teul, la cerámica tradicional de Pinos, el trabajo de los joyeros y los molcajetes de la comunidad de La Cantera, en Fresnillo, “son los mejores que he visto en todo México”, aseguró alguna vez, según la fuente citada.

La partida de la maestra Teresa Pomar dejará una huella indeleble en el trabajo de promoción de la cultura popular mexicana. Su legado permanecerá como ejemplo a futuros promotores culturales que, al igual que ella, sientan un enorme aprecio por lo que las artesanías nos cuentan sobre nuestro pasado y presente.

Comentarios a esta nota: gregorio.martinez@azteca21.com

Foto: La maestra Teresa Pomar durante una conferencia en Zacatecas.
Cortesía: IDEAZ.

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