católica e indígena.
Con la participación de 120 artistas, el Ballet presentará sus distinguidas y coloridas danzas alusivas a la Navidad, que se ejecutan en diversos estados, como Guerrero, Michoacán, Jalisco y Tlaxcala, y que fueron previamente investigadas.
En conferencia de prensa, Salvador López, director de la compañía nacida en 1952 y que tiene como sede el Palacio de Bellas Artes desde 1959, comentó que Navidades en México se acompañará de coros, mariachi, 40 niños de la Escuela del Ballet Folklórico, y se recreará un Nacimiento en la explanada con animales vivos, como caballos, vacas, burros y borregos.
Amalia Hernández —expresó— ya había concebido este proyecto, pero quien lo concluyó fue su hija Norma López Hernández con el apoyo de otros coreógrafos. “Hicimos una investigación en diferentes estados sobre las danzas alusivas a la Navidad, el vestuario que utilizan, y las representaciones que hacen del diablo. Todo eso lo plasmamos en un montaje que refleja el sincretismo cultural entre las costumbres católica e indígena”.
“Justamente la Navidad es una de las tradiciones que mejor reflejan esta fusión, por tal motivo, ella tenía mucho interés en representarla mediante la danza y la música, que constituyen unas de las mayores expresiones de la cultura popular mexicana”.
En su intervención, Salvador Rueda, director del Museo Nacional de Historia “Castillo de Chapultepec”, añadió que la obra hace una reinterpretación moderna de viejos textos y permite revivir el Novenario del Adviento a partir de sus orígenes virreinales y decimonónicos. “De este modo, podemos recuperar las diversas identidades que conforman el ser mexicanos”.
Asimismo, el historiador se refirió a la necesidad de buscar caminos que acerquen más al público a este recinto, “y en el Ballet Folklórico hemos encontrado una forma muy atractiva de llamar su atención”. Agregó que este espectáculo resultará muy atractivo para los niños, quienes sin duda, recordarán en el futuro esta puesta escénica en un edificio histórico.
Las danzas, los cantos y los villancicos son el hilo conductor del espectáculo, que comienza con la presencia de los pastores que interpretan un tema originario de Huajintepec, de la Costa Chica de Guerrero, dedicado a la estrella de Belén que anuncia el Nacimiento del Niño Jesús.
La puesta en escena continúa con la batalla entre arcángeles y diablos, representada con bailes del Estado de México y de Puebla, y luego da paso al Nacimiento del Niño Dios con el tema Aleluya, del compositor michoacano Miguel Bernal, y un canto de arrullo navideño proveniente de San Pedro Piedra Gorda, Zacatecas.
La procesión se recrea con los regalos que la gente del pueblo ofrece al Niño Jesús, mientras se interpreta un villancico del siglo XVI.
La llegada de los Reyes Magos es el cuadro escénico más colorido, y donde esta fusión cultural florece en el escenario, porque Melchor, Gaspar y Baltasar ofrendan la Danza de Moros, de Michoacán, que alude al rey árabe; los bailes Toreras, La Culebra y Cuchillos, de Tlaxcala, que refieren al soberano europeo; y la Danza de Diablos de Ometepec, Guerrero, que hace alusión al monarca africano.
La fiesta culmina con el tema Navidades en Jalisco: piñatas, música de mariachi y un despliegue de bailes como El Tranchete, El Son de La Negra y El Jarabe Tapatío.
Para el maestro Salvador López, la presentación del Ballet Folklórico de México en el Castillo de Chapultepec, “representa la oportunidad y el orgullo de llevar las tradiciones mexicanas a un edificio emblemático de América que es un referente vital de la historia del país”.
“Creemos que este proyecto podría detonar en una gira por diferentes escenarios al aire libre en los estados del país, la intención es que se convierta en un clásico de Navidad que se presente cada año”, apuntó el director de la compañía, que ha recorrido los principales escenarios del mundo y ha sido aplaudida por más de 25 millones de espectadores.
El espectáculo dura una hora y diez minutos, y la admisión general tiene un costo de 600 pesos. Se ofrecerá 50 por ciento de descuento a menores de 12 años, personas de la tercera edad y trabajadores de los institutos nacionales de Antropología e Historia, y de Bellas Artes, así como del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
Las funciones se llevarán a cabo del 16 al 20 de diciembre, a las 20 horas en la explanada del Castillo de Chapultepec, con capacidad para 850 personas, y de acuerdo con la respuesta del público se podrían ofrecer tres fechas más.
Fuente: (INAH)
