ninfas y sirenas, que bajo su dirección se presentó la noche de este lunes en el Teatro de la Danza del Centro Cultural del Bosque y que justamente rescata la verdadera esencia de este género a través de una peculiar fusión dancística.
Previamente a la función, impulsada por la Asociación Mexicana de Danza Árabe y Bellydanca A.C., Del Castillo compartió en entrevista algunas reflexiones en torno a los objetivos que su compañía Raks Yevoc se ha impuesto desde 2006 para dignificar un género que, en su opinión, se ha denigrado ante la presencia de tantas escuelas y maestros improvisados, es decir, que no cuentan con la preparación suficiente ni correcta para enseñar la danza árabe.
Y es que para bailar dicho género se requiere tener de un gran conocimiento sobre esta cultura, así como una técnica corporal para ejecutar con precisión todos los movimientos, pues cada uno tiene un significado especial.
Así quedó demostrado este lunes, donde todos los bailarines –la mayoría mujeres-, evidenciaron su vasta preparación y su pasión por la danza. Durante una hora y media, mostraron que la danza árabe es más que movimientos sensuales, rítmicos o alegres, sino una expresión corporal que busca comunicarse con el mundo.
De hadas, ninfas y sirenas es un llamado a reflexionar sobre el futuro de nuestro planeta, de la necesidad de unir esfuerzos para protegerlo y de no dejar de soñar, de creer, para asegurar su salvación.
Para hacerlo más lúdico, se pensó en personajes oníricos como hadas, ninfas y sirenas, los cuales cobran vida a través de los singulares movimientos de la danza árabe, fusionada con algunos elementos de la danza contemporánea y clásica.
Para Del Castillo y los bailarines involucrados en esta función (provenientes de varios estados de la República Mexicana) su presentación en el Teatro de la Danza fue significativa, ya que reafirma el profesionalismo de su propuesta, pues el INBA no abre sus recintos a cualquier agrupación.
“No toda la danza árabe que se hace en este momento en nuestro país tiene un nivel adecuado para presentarse en un recinto tan prestigiado. Así que conformamos este espectáculo con bailarines y coreógrafos de distintas zonas de nuestro país que están haciendo una danza árabe de calidad”, dijo la directora del montaje.
Al preguntarle sobre la razón de proponer una danza fusión cuando su objetivo primordial es reivindicar al género, la bailarina explica que tiene una premisa muy clara: la danza no tiene fronteras, es decir, que es un arte que es resultado de una gran variedad de fusiones dancísticas:
“Todo al final es fusión y nosotros no estamos apostándole a una danza árabe purista o totalmente tradicional. Evidentemente partimos de estas raíces pero al tratarse de una manifestación que se ha enriquecido con muchos elementos culturales amplia nuestro campo de acción escénico. Se trata de una danza con amplias expresiones que nos permiten contar algo”.
Finalmente, del Castillo anuncia que será del 2 al 6 de diciembre próximo cuando se lleve a cabo el Segundo Congreso Mexicano de Danza Árabe y Bellydance, que ha contribuido a difundir el verdadero valor cultural de este género así como su correcta interpretación.
GJB
Fuente: (CONACULTA)