Eloy Cavazos sale a hombros del festival taurino celebrado en la Plaza de Cadereyta donde corta tras orejas y rabo

las necesitan.

En ese festejo, que registró una buena entrada, se lidiaron bureles de diversas ganaderías que dieron juego desigual y terminaron por deslucir el festival.

Cavazos se enfrentó al segundo de la tarde de la dehesa de Montecristo, que era deslucido, falto de fuerza y rebrincaba en las embestidas, pero el coleta estuvo voluntarioso y a pesar de que su enemigo no colaboraba, logró tandas por ambos lados entre el “olé” de los presentes.

Luego de ligar varias tandas, el diestro ejecutó la “regiomontana”, que animó más al respetable, eliminó a su enemigo de tres cuartos de estocada y así el juez de plaza, Antonio Quiroga, le concedió las dos orejas y el rabo.

Enrique Garza lidió a un astado de la ganadería de Jesús Cabrera, ante el cual estuvo bien con el capote, cubrió bien el segundo tercio con tres buenos pares de banderillas y con la muleta cuajó una faena por ambos lados.

Después de dar un pinchazo, el neoleonés pasaportó a su rival de estocada desprendida y perpendicular y la autoridad le concedió dos apéndices.

El aficionado práctico César Villanueva estuvo voluntarioso ante un burel de Jaime Cavazos que fue soso, logró sólo algunos derechazos de buena manufactura y a la hora de pasaportar a su enemigo dio una estocada defectuosa, ya que caló al astado, pero aún así, de manera errónea, el juez le concedió una oreja.

Oscar López Rivera se lució con un toro de El Vergel, que colaboró con el coleta, quien se lució por chicuelinas que remató con una revolera y con la muleta cuajó una buena faena por derecha.

Sin embargo, el diestro malogró su labor en el ruedo al eternizarse con el acero, en virtud de que fulminó al cuarto viaje y finalmente dio vuelta al ruedo.

Juan Antonio Adame y Cristian Aparicio enfrentaron a astados de Jaime Cavazos que dieron mal juego y finalmente no consiguieron redondear sus actuaciones, por lo que se fueron sin trofeos.

Al término del festejo, Eloy Cavazos se dijo contento porque casi se llenó la plaza de Cadereyta, con lo que se ayudará a decenas de personas que necesitan silla de ruedas.

Respecto de si participará en las próximas ediciones del festival que se efectúa anualmente, el diestro aseveró que “no lo sé, falta mucho para que venga el otro año, pero yo creo que ya no, ya no puedo torear. Ahorita estoy muy contento de cortar un rabo, pero el año que entra tendré 61 años y voy a batallar más”.
Fuente: (Notimex)

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