latinoamericanos.
“Mando un saludo a mis papás en el sur de California, a mi tía Rosa, a mis compadres allá en La Piedad, Michoacán, y a nuestro presidente de México, don Felipe Calderón, que también es de Michoacán, y a todos los mexicanos”, dijo Hernández en una entrevista transmitida por la NASA y concedida a la cadena CNN en español.
“Un fuerte saludo a todos los latinos”, señaló el ingeniero de 47 años y de origen mexicano, quien se alejó un rato del trabajo en la estación espacial.
En tono relajado, Hernández explicó que se mantiene haciendo ejercicio en una bicicleta en la EEI y que cuando regrese a la Tierra va a reiniciar su rutina de 10 kilómetros diarios para poder “comer todo el mole poblano que quiera y todas las carnitas”.
En el mismo tono dijo que se iba a convertir “en un charro como los de Jalisco” al bromear con el cable del micrófono que flotaba como una soga frente a él debido a la ingravidez.
En otra entrevista con la televisora mexicana Televisa, el astronauta dijo que México se ve muy bello desde el espacio.
“Cada rato estoy viendo cuando pasamos por México a ver si puedo intensificar el área de Michoacán, de donde soy yo. Obviamente cuando paso de noche por la ciudad de México se ve toda alumbrada y se puede distinguir muy fácil. Y las playas de Cancún hasta acá se ven bien riquísimas”.
En tono más serio descartó tener miedo en la misión espacial, porque dijo que se han entrenado muy bien y están preparados para cualquier contingencia en el espacio.
Agregó que le sorprende poder ver al mundo “como uno entero de verdad. Porque uno cuando va a la escuela ve los mapas y uno ve las fronteras políticas, y sin embargo al estar acá en el espacio uno no ve ninguna frontera y digo que es algo muy bonito”.
“Más bien hemos de traer a todos los presidentes y líderes que vean el mundo desde esta perspectiva, para que ellos también se den cuenta de que no son tan importantes las fronteras políticas. Hay que trabajar todos como un solo”, agregó.
Dijo que a pesar de ser científico es un hombre de fe y católico, que lleva su escapulario y que el hecho de llegar al
espacio no aumenta o disminuye su fe en Dios.
“No disminuye mis creencias, porque uno puede ver aquí con sus propios ojos la maravilla de nuestro mundo, lo que es la atmósfera, algo muy delgadito que es lo que nos mantiene en vida”, aseveró.
“No es posible que esto nada más fue por casualidad, yo creo que hay un plan grande, un poder tal que nosotros aún no comprendemos y eso es lo que me hace creer en mi fe”, agregó Hernández.
En declaraciones a la cadena CNN, el astronauta descartó que la falla de comunicación que duró 30 minutos durante la primera caminata espacial haya puesto en peligro la misión.
Describió como los momentos más críticos de la misión los primeros ocho minutos del lanzamiento del transbordador Discovery, el 29 de agosto pasado, por la cantidad de combustible que llevaba, así como lo será el reingreso a la atmósfera terrestre por las altas temperaturas.
“Como ya hemos volado más de 120 veces al espacio con estos transbordadores se podría pensar que es rutina, pero obviamente al viajar al espacio nada es rutina”, subrayó.
Fuente: (Notimex)
