José Vasconcelos, recordado por su exaltación de lo indígena y su afirmación de lo auténtico mexican

Filósofo, abogado, escritor,
político, educador, amante
de su raza y su nación,
Vasconcelos es autor
del lema de la UNAM,
'Por mi raza hablará el espíritu'
Foto: Cortesía
razacosmica.files.wordpress.com

Ciudad de México.- 29 de Junio del 2008.- (CONACULTA) Recordado por sus misiones culturales, llegadas a todos los rincones del país; sus teatros al aire libre, la exaltación de lo indígena y la afirmación de lo auténtico mexicano, José Vasconcelos es un personaje emblemático de la cultura nacional y es en su memoria que se bautizó con su nombre a la Megabiblioteca, ubicada en Buenavista, en el norte de esta ciudad.

Ese inmueble cuenta con un auditorio, una librería y oficinas administrativas, que en total abarcarán 44 mil metros cuadrados de construcción. El jardín botánico que la rodea ocupa 22 mil metros cuadrados. Fue inaugurada el 17 de mayo de 2006.

Vasconcelos nació el 27 de febrero de 1882 y murió el 30 de junio de 1959. Vivió de niño en Sonora, Coahuila y Campeche, antes de llegar a la capital del país, donde estudió en la Escuela Nacional Preparatoria y en la de Jurisprudencia, de donde se recibió en 1907. Para 1909 presidía ya el Ateneo de México.

En junio de 1920 asumió la rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México, donde organizó el magisterio en tres departamentos: Escolar, de Bellas Artes y de Bibliotecas y Archivos; mejoró la Biblioteca Nacional y creó varios repositorios bibliográficos populares.

También a él se atribuye la edición de una serie de clásicos de la literatura universal, la revista El Maestro y el semanario La Antorcha.

Invitó a trabajar en el país a los educadores Gabriela Mistral (chilena), Nobel de Literatura, y Pedro Henríquez Ureña (dominicano); impulsó la escuela y las misiones rurales, y promovió la pintura mural.

Relatan sus biógrafos que por diferencias políticas con el régimen, se alejó del país, pero volvió en 1928, para lanzar su candidatura a la Presidencia; derrotado en las elecciones del año siguiente, se exilia de nuevo y regresa gasta 1940.

En esa época dirigió la Biblioteca México y obtuvo el doctorado Honoris Causa por las universidades Nacional Autónoma de México y de Puerto Rico, Chile, Guatemala y El Salvador; fue miembro fundador de El Colegio Nacional (1943) y perteneció a la Academia Mexicana de la Lengua.

Miembro de la Academia Mexicana de la Lengua, Vasconcelos tuvo mucho méritos, entre ellos, la creación de la Secretaría de Educación, con la cual movió a la inteligencia de México, a los hombres de buena voluntad, a niños, jóvenes y adultos deseosos de aprender.

Según los conocedores de su obra, Vasconcelos fue un filósofo que todo lo vio bajo el signo de lo bello; que lo perseguía, hasta dar con él en cada uno de los seres.

"Escritor político y ciudadano de avisada y sesuda ciudadanía, nos hizo ver a los mexicanos lo que es, lo que debe ser México", consideran sus seguidores, quienes destacan su capacidad para ser convincente y su aspereza para "fustigar a los pillos".

Fue el creador de una nueva universidad, a la que dio el lema de "Por mi Raza Hablará el Espíritu".

Vasconcelos, destacan los expertos, es grande como escritor, grande como político, grande como hombre que hizo historia, y por lo uno y por lo otro será constante y obligado compañero y guía de quienes mantienen su causa y compromiso con México.

José Vasconcelos fue autor de numerosos artículos periodísticos, ensayos y estudios sobre Filosofía, Historia y Pedagogía, entre los que destacan El Movimiento Intelectual Contemporáneo (1916), El Monismo Estético (1918), Divagaciones Literarias (1919) y Orientación del Pensamiento en México (1922).

Asimismo, La Revolución de la Energía -los ciclos de la fuerza, el cambio y la existencia- (1924), Quetzalcóatl (1929), La Raza Cósmica y Ulises Criollo (1935), entre muchos otros.  (Notimex)

Leave a Reply