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Todo el sabor de la cocina
oaxaqueña, podrá ser disfrutada
por los capitalinos. ¡Qué envidia!
Foto: Internet
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Ciudad de México.- 8 de Febrero del 2007.- El sonido de la marimba y el colorido de los trajes típicos oaxaqueños, lo mismo que el recuerdo del escritor Andrés Henestrosa, fallecido en enero pasado, abrieron hoy las actividades de la Presencia de Oaxaca en la Ciudad de México, misma que se lleva a cabo en el Centro Nacional de las Artes (Cenart).
Este acontecimiento, que finalizará el 17 de febrero, reúne la tradición y belleza del estado sureño, y es realizado por el Grupo Cultural Oaxaca: Arte, Fiesta y Tradición.
En él participan más de 120 personas que buscan rescatar, preservar y promover la riqueza cultural de Oaxaca.
Los pasillos del Cenart se cubrieron a partir de hoy de olores y colores a través de la instalación de un mercado tradicional que recrea estos populares espacios, mismos que son instalados de manera cotidiana en las ocho regiones que integran el estado, compuesto por 570 municipios.
En los locales se exhiben desde ropa típica, bolsas de ixtle, manteles, rebozos, sombreros, hamacas y juguetes; así como el tradicional barro negro, anaranjado, verde y reproducciones prehispánicas, joyería del Istmo y trabajos en filigrana.
En el escaparate oaxaqueño no faltan el suculento chocolate, las tlayudas que despiden un intenso aroma y el café característico; además es posible encontrar tamales, empanadas, quesillo, mezcal, pinole y las variedades de moles negro, colorado, amarillo, verde, chichilo, almendrado y estofado.
Con esta presencia, el grupo que encabeza el artesano Alberto Vázquez Sánchez conmemora 20 años de existencia y en este 2008 el Cenart también contará con su propia versión de la antigua ceremonia oaxaqueña de la Guelaguetza, que simboliza ayuda mutua y hermandad entre los habitantes de los pueblos.
La Guelaguetza o tequio se festeja año con año en Cerro del Fortín y reúne a más de 13 mil comunidades, 570 municipios, ocho regiones y 17 naciones étnicas, culturales, mestizas y afro mestizas.
La versión para la Ciudad de México se llevará a cabo del 9 al 15 de febrero y aquí los visitantes podrán participar en talleres gratuitos de danzas de esta ceremonia, donde las regiones de Cañada, Sierra Norte y Tuxtepec estarán representadas.
A lo largo de la jornada también habrá representación de la Costa Chica, región que comprende parte de los estados de Oaxaca y Guerrero. En esos lugares se practica un género de baile conocido como chilena, expresión del sincretismo entre los grupos negros e indígenas de la entidad.
Los tradicionales sones estarán representados por su música profana, alegre y mestiza, a través de un concierto de Sones y chilenas, el lunes 11 de febrero; así como con la presentación de sones, jarabes y chilenas de la Sierra Sur, el miércoles 13.
En el mismo marco, la investigadora Alejandrina Pedro ofrecerá la conferencia "Riqueza ancestral de la cultura mazateca" en la que hablará de este reino como el lugar de encuentro con los dioses, la magia, el misterio y la sabiduría milenaria.
Además abordará la riqueza de la flora mazateca, sus especies endémicas y más de 300 tipos de orquídeas exóticas, la herbolaria y medicina sagrada, que tomó forma de la mano de María Sabina.
Para el día del cierre se dará un taller gratuito de elaboración de papalotes bajo el título "Un encuentro con el cielo", que dirigirá Ubaldo Rojas y se recordará nuevamente al autor de "Los hombres que dispersó la danza", mediante la conferencia "Recordando al ilustre oaxaqueño: maestro Andrés Henestrosa Morales. Niña cuando yo muera!". (Notimex)
