
Inicia ciclo “Voces del Jazz” con la pasión y sensualidad interpretativa de Elizabeth Meza y su grup
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Elizabeth Meza, 'Diva por
excelencia', fusionó en su
tercer disco, 'Fascinación',
el jazz latino con estándares
americanos y mexicanos
Foto: Cortesía
Jorge Vargas/CONACULTA
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Comenzó el ciclo Voces del Jazz en el Centro Nacional de las Artes el pasado sábado y concluirá hasta el domingo 24 de febrero. El programa incluye un tributo a cantantes, músicos, poetas y compositores como Nat King Cole y Vinicius de Moraes
Ciudad de México.- 6 de Febrero del 2008.- (Alfredo Camacho/CONACULTA) “En el jazz se puede experimentar todo: es pasión, dolor y amor, entre otras muchas cosas”, afirmó la cantante mexicana Elizabeth Meza, quien, con su sensualidad interpretativa que la caracteriza, abrió el ciclo “Voces del Jazz” en el Centro Nacional de las Artes para deleite de más de 500 amantes del género que se dieron cita el pasado sábado en la Plaza de las Artes.
Minutos antes de subir al escenario concedió una entrevista para externar: “Mis músicos y yo estamos felices de regresar por segunda ocasión a este lugar, que desde hace ya varios años dedica un espacio al jazz y para rendir tributo a los grandes exponentes.
“En sus orígenes, el jazz simbolizó el canto de dolor de la gente de color. Con el paso del tiempo se transformó en pasión e inspiración para el amor. Yo misma por ahí compuse un tema de jazz dedicado a cierta personita, pero no voy a decir el nombre, de la cual guardo gratos recuerdos”, acotó Meza.
Asimismo, ante la respuesta de la gente a la convocatoria (que llenó asientos, pasillos y escaleras de la Plaza de las Artes), comentó: “Es una de las partes gratificantes de esta bella profesión; que un escenario se llene, que te acompañen en la interpretación de los temas en un gigantesco coro y que te aplaudan. Es el mejor pago que uno puede recibir”.
Elizabeth Meza salió al escenario donde ya habían calentado el ambiente sus músicos Roberto Avallo (guitarra), Víctor Patrón (piano), Iván Barrera (contrabajo) y Gabriel Puentes (batería). Y comenzó a cantar con su peculiar estilo: “un estándar que todos los cantantes de jazz debemos interpretar, pero habrá un poco de todo”, dijo.
La sensualidad se desbordó al tocar turno al tema Volveré que corearon cientos de gargantas: “Fui la luna de tus noches/tú, como las estrellas, de mis noches te adueñas/siempre volveré por ti”.
Luego impuso su sello personal a Cuando vuelva a tu lado, de María Grever. Después siguió con el blues Si vuelvo, con letra que elevó a los presentes hasta el cielo mismo: “Ya no me pidas que regrese/tantas noches tantos besos/cierro mis ojos y mis sueños van a ti”.
Los músicos también pusieron su granito de arena para agigantar la tarde inicial de “Voces del Jazz”. Elizabeth Meza los convocó a resaltar cada uno de sus instrumentos, con el merecido aplauso del público, y con su guitarrista hasta cantó a dúo.
Elizabeth Meza, "Diva por excelencia", fusionó en su tercer disco, Fascinación, el jazz latino con estándares americanos y mexicanos. En su trabajo más reciente, titulado Obsesión, realizó una compilación de boleros con un tratamiento muy personal y su indiscutible sello vocal.
Con una trayectoria de más de 20 años, Elizabeth ha abordado diversos géneros musicales como jazz, pop, salsa, reggae y música tradicional mexicana.
En el ámbito del jazz latino cuenta con un amplio bagaje y conocimiento y ha cautivado al público en clubes de México y Europa.
La artista fungió como jurado del reality show “Latin American Idol”, y al lado de María Elena Durán y Regina Orozco forma parte del segundo volumen de Divas por excelencia,.
Elizabeth Meza comenzó su carrera como vocalista a muy temprana edad. De pequeña ya sentía que la música era una parte muy importante de su vida y sabía que tarde o temprano sería artista.
Poco después de convertirse en vocalista, Elizabeth actuó como solista con la orquesta de la Universad de Veracruz en Xalapa. Posteriormente se trasladó a la ciudad de México, donde comenzó a presentarse en vivo en conciertos de jazz.
Sus talentos profesional y musical se perfeccionaron cuando decidió viajar a Inglaterra en la década de los ochenta con el propósito de complementar su preparación artística. Comenzó tomando clases de dicción en inglés y fue corista en conocidas bandas de la década. Este es el caso de Jazz-Funk Band, con quien grabó Treatment (The Rules of Love) como solista. Durante esos años estuvo en gira por diferentes países europeos.
Por ese tiempo viajó a Amsterdam, Holanda, donde grabó el álbum 16 K y estuvo de gira por la Costa del Sol en España con un trío de jazz, participando en festivales a través de la parte sur de la Península Ibérica. Su estadía en el continente europeo le permitió viajar a París y Alsacia, así como otras ciudades, mientras se presentaba en festivales de jazz y centros nocturnos.
A principios de los noventa, Elizabeth regresó a México, donde la búsqueda de su propia identidad musical la llevó a participar en arreglos vocales y colaboraciones de grabación, así como numerosas giras con artistas internaciones como Deep Purple y Jim Brickman, entre otros.