Cardiaca voltereta y México pasa a la final en el Campeonato Panamericano de Beisbol de 17-18 años

El conjunto azteca celebra el triunfo
ante Canadá en un estadio
lleno hasta los topes
Foto: Cortesía lmb.com.mx

Ixtapa -Zihuatanejo, Guerrero.-31 de Agosto del 2007.- Con una gran reacción en las últimas entradas, la Selección Mexicana de Beisbol de 17-18 años se clasificó a la final del XI Campeonato Panamericano de la especialidad, al vencer por pizarra de 5 carreras a 4 a Canadá ante un lleno en el estadio de la Unidad Deportiva de esta ciudad guerrerense.

Los canadienses iniciaron con el lanzador recien adquirido por los Orioles de Baltimore, Phillippe Aumont, el cual tiró rayas de hasta 94 millas por hora y ponchó a cinco bateadores de nueve, no aceptó ningun hit en sus tres entradas lanzadas, siendo apoyado por su ofensiva, los cuales consiguieron dos carreras para poner una ventaja importante para la novena de la hoja de maple.

Después de siete entradas, los mexicanos no encontraban fórmula para poder regresar al partido, sin embargo las cosas cambiaron en el octavo capítulo, cuando el tercera base canadiense Brett Lawrie tiró mal a segunda para que anotara desde la antesala Ramón Navarrete la primera carrera de los locales.

El tamaulipeco Sergio Pérez conectaría una linea al jardín izquierdo para mandar a Rafael Solano con la anotación del empate, poniendo las cosas listas para que Antonio Lamas impulsara a Luis Juárez con la carrera de la diferencia hasta ese momento.

Los canadienses se le pondrían duros al cerrador Florencio Bustillos, llenándose las bases y propiciando su salida, siendo Luis Méndez el relevo, quien tuvo mala fortuna al aceptar un imparable de Lawrie al izquierdo para que anotara Michael Crouse el empate.

Las cosas empeorarían para los dirigidos por Enrique "Che" Reyes, ya que con un wild pitch de Méndez, entraría a la registradora Carte Bell para poner el marcador 4-3 a favor de la novena del norte.

Pero el ánimo no decayó en la gente que abarrotó las gradas de la Unidad Deportiva, y con una lluvia pertinaz, al grito de "sí se puede", empezaron a apoyar a la novena azteca para que tuviera un regreso en su última oportunidad dentro del partido.

Y con ese apoyo, los mexicanos le llenaron la casa al lanzador Danny Briton, quien tras dos bases por bolas consecutivas, le dejó la responsabilidad a Nick Bussi.

Sin embargo Bussi empezó con una base por bolas a Eliseo Aldazaba, para que entrara de caballito Leonardo Heras, y finalmente el lanzador canadiense sería el héroe local al lanzar un wild pitch que aprovechó Ramón Navarrete para entrar con la carrera del triunfo y del pase a la gran final.

Los canadienses se quedaron incrédulos en su caseta mientras los mexicanos celebraban su boleto al partido por el título con una rueda por parte de los peloteros en el montículo, agradeciendo a la fiel afición de Zihuatanejo, los cuales apoyaron con todo a la escuadra tricolor.

Luis Juárez, quien entró con la carrera del empate en el octavo rollo, señaló que la novena local está lista para enfrentar a los campeones cubanos.

"Estoy muy orgulloso de mis compañeros, se lucieron, nunca nos sentimos abajo, y creo que eso fue la clave del triunfo, y ahora a demostrar que México está a la altura de potencias, y mañana lo refrendaremos ante Cuba" dijo el receptor azteca.

Ahora la novena tricolor tratará de desbancar a los cubanos del primer lugar que han obtenido en muchas ocasiones anteriores, siendo la última precisamente en territorio mexicano, en Villahermosa, Tabasco, en el 2005, cuando la novena antillana derrotó a Estados Unidos 2 carreras a 1 en el Estadio Centenario.

Pizarra

Canadá 4 carreras, 11 imparables, 2 errores

México 5 carreras, 2 imparables, 1 error

Lanzador ganador Luis Méndez (1-0)

Lanzador perdedor Danny Briton (0-1)

CUBA RESUCITA CON TRES CARRERAS EN LA NOVENA ENTRADA Y ES FINALISTA

El pitcher Ryan Weber había contenido a la mejor ofensiva del torneo durante ocho entradas sin carreras, pero a dos outs del final, una base por golpe y un error del parador en corto Mychal Givens, echaron al traste el gran partido que había dado Estados Unidos, para perder de manera agónica en la semifinal del Campeonato Panamericano de Beisbol 17-18 años, 3 carreras a 2 ante el equipo de Cuba.

En el estadio de la Hacienda, en Coacoyul, Zihuatanejo, se vivió un ambiente de fiesta para recibir el clásico del beisbol mundial, donde la disputa política y beisbolera, convergen en una sola para disputar el título de la excelencia en el rey de los deportes, en el que los jugadores amateurs, volvieron a demostrar su categoría como en el pasado Clásico Mundial, y Juegos Panamericanos de Río de Janeiro, donde se colocaron por arriba de los norteamericanos.

Weber, el mejor lanzador estadounidense del Campeonato, había recetado cinco ponches a los cubanos, sin anotaciones, una bases por bolas y admitir seis hits, hasta que en la novena entrada, última oportunidad para los cubanos quienes fungían como locales, con un out en la pizarra, Ismael Gálvez recibió golpe, Jorge Barcelán roleteó pero Mychal Givens pifió en el campo corto, para encender las esperanzas de los de la isla, quienes se inspiraron y batearon tres hits seguidos para darle el triunfo agónico a Cuba.

"Estoy muy contento de este triunfo, el equipo jugó un tremendo partido, en lo particular me desempeñé muy bien igual que mi compañero Adenis Echavarría, y ahora el equipo cubano está con un ánimo hasta las nubes para enfrentar el partido de este domingo y llevarnos la medalla de oro", señaló José Iglesias, uno de los protagonistas del encuentro quien bateó de 3-2, dos hits y un doblete.

Fredy Asiel, al ritmo de sus pitcheos de 94 millas por hora, y de los timbales del público cubano, lanzó el juego completo admitiendo dos carreras, seis indiscutibles, una base por bolas y tres ponches, agenciándose la victoria más importante de su carrera, vencer a los Estados Unidos y llevar a su equipo a la final del Campeonato Panamericano ante los locales: México.

Asiel tenía maniatados a los de las barras y las estrellas, en dos hits, pero con dos hombres en posición de anotar en la fatídica séptima entrada, un error del parador en corto, Adenis Echevarría, más un sencillo productor de Rob Grossman, alimentó las ilusiones de Estados Unidos para vencer al rival odiado, pero no contaban con la astucia de la ofensiva cubana que le daría la vuelta al marcador.

Nick Maronde relevó a Ryan Weber con un out en la pizarra, dos hombres en base y el partido a su favor 2-1. Comenzó tirando un misil de 95 millas por horas en todo el centro del plato ante el emergente Jorge Rivero, quien supo esperar su pitcheo y posteriormente dar hit por todo el jardín derecho remolcando a Jorge Barcelán con la carrera del empate, ante el alarido de los cubanos y de la porra isleña. Cuando los norteamericanos apenas se habían dado cuenta de que habían perdido su ventaja, Adenis Echavarría fue el héroe del encuentro al dar sencillo entre el jardín izquierdo y central, para mandar a jom con la carrera de la victoria a Yasniel Cabezas.

"Estados Unidos es un señor equipo, tienen muchos peloteros de calidad, pero nosotros supimos venir de abajo como siempre hacemos, y la victoria es nuestra. A pesar de que no tenemos peloteros profesionales, somos un país desarrollado en el beisbol, lo damos todo en el terreno de juego, y seguiremos adelante siempre", admitió Jorge Barcelán, tercera base del equipo cubano, quien anotó la carrera del empate.

Cuba es el favorito para ganar este Panamericano, cuenta con la mejor ofensiva (57 hits), la mejor defensiva (cinco carreras), pero se enfrentará a México quienes llegan embalados invictos y con el apoyo del público local.

Pizarra

Estados Unidos 2 carreras, 6 imparables, 1 error

Cuba 3 carreras, 10 imparables, 4 errores

Lanzador ganador Fredy Asiel Àlvarez (2-0)

Lanzador perdedor Ryan Weber (1-1)

Leave a Reply