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Brad Pitt, Salma Hayek y otras luminarias de
Hollywood, aplaudieron el comentario
del cineasta mexicano
Foto: Agencias
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Ciudad de México.- 16 de Enero del 2007.- Para el ganador del Globo de Oro a la Mejor Película Dramática, el mexicano Alejandro González Iñárritu, resulta "irónico y paradójico" que el gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, le haya entregado el premio, "cuando sabemos que él impulsa el levantamiento de un muro contra los mexicanos".
"A mí me dio miedo ver frente a frente al gobernador de California. Creí que en ese momento me iba a pedir mis papeles y me iba a deportar, por eso le dije que tenía todos mis documentos en regla", afirmó el cineasta, para agregar que "ignoro cuál haya sido la intención de que el gobernador de California me entregara el premio".
Evidentemente, dijo, "traté de hacer un comentario con humor, por lo que espero que el gobernador haya sabido leer el subtexto que deslice debajo de mis palabras, porque me parece que su presencia es muy paradójica en este momento de debate profundo por la migración".
Iñárritu se refirió al debate en torno a la barda que se levanta en la frontera México-Estados Unidos, para evitar el paso ilegal de nacionales hacia el país del norte. "Que el gobernador de California le dé a un mexicano un premio tan importante, me parece irónico y paradójico, por eso espero que haya entendido el mensaje:
"El subtexto le dice que ojalá también entregue premios a todos los inmigrantes que han aportado tanto a la cultura y a la economía estadounidense, por eso me parece de esa forma su presencia y su disposición para entregarme el Globo", dijo el director de "Babel".
Al momento de recibir el premio de manos del gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, González Iñárritu lanzó una indirecta, muy directa, de esas que en México se dice que "calientan": "Mi gobernador, tengo mis papeles en orden, no me vaya a deportar", en un inglés perfecto, ante el asombro de los asistentes.
Brad Pitt, Salma Hayek y otras luminarias de Hollywood, aplaudieron el comentario del cineasta mexicano ante el cual, el mandatario estatal nada más esbozó una sonrisa como pensando "que bien manejas la ironía tú también, mexicano". El gran salón soltó una sonora carcajada ante el inesperado y breve discurso del realizador.
Recordó el entrevistado que en "Babel" trabajaron mil 200 personas durante un año de producción, es decir, preparación, rodaje y postproducción, traducción a varios idiomas y llevarla por el mundo. ¿El resultado? Anoche recibió el Globo de Oro como Mejor Película Dramática, lo cual resulta valioso para el cine mexicano.
Es una película como las que él acostumbra: Tres historias que se engarzan, donde una ametralladora que se vende es el objeto central de la trama, y con base en ese hecho se desarrollan las tres aventuras en igual número de diferentes lugares del mundo, donde evidentemente se desenvuelve el drama en su más pura expresión.
González Iñárritu, quien en sus años rosas fuera locutor de radio en la Ciudad de México es un joven que sabe expresar a través del cine lo que él piensa y visualiza en una extraordinaria traducción al lenguaje del cine. "Estoy satisfecho, los premios son regalos y cuando me regalan algo no le pongo ningún pero", finiquitó.
(Notimex)
