El sexo y el lenguaje como forma de dominio femenino en la novela “Deseo”, de Elfriede Jelinek

La autora Elfriede
Jelinek es
nativa de Austria
Foto: Azteca21

Enrique Montañez
Reportero Azteca21

Ciudad de México. 6 de diciembre de 2006. Editorial Destino publicó en fechas recientes “Deseo”, una de las novelas más polémicas y controvertidas de Elfriede Jelinek, Premio Nobel de Literatura 2004. Dicha obra provocó de inmediato interés inusitado en Austria, país natal de la escritora, por su crudeza en el tratamiento temático del sometimiento en la pareja.

Malcom Otero, director editorial de Destino, afirmó en la presentación del libro que “Deseo” representa un ejercicio narrativo prodigioso tanto desde el punto de vista del estilo como estructural. "Es una novela con un lenguaje extremadamente duro, que intenta transmitir la sensación de sumisión y opresión de la mujer".

Por su parte, Karin Cervenka, agregada cultural de Austria y portavoz de Jelinek en España, desestimó que la novela fuera sólo de pretensiones eróticas, sino que su objetivo, aseguró, es dilucidar cómo se utiliza el idioma para dominar a otras personas, “y Jelinek demuestra que el instrumento de dominio de la mujer es el lenguaje y no el sexo”.

“Deseo” es la historia del director de una fábrica de papel quien, aterrado por los riesgos del sida, decide retomar la vida sexual con su esposa, pero la utiliza como lo hacía con las diferentes prostitutas que frecuentaba. La trama se complica y enrarece al presenciar el hijo de los protagonistas las escenas de perversión y obscenidad que suceden dentro del espacio matrimonial, además de la aparición de un amante más joven que la esposa, en franca angustia por el sometimiento sexual del que es víctima, que cree necesario para su liberación.

La escritura de Elfriede Jelinek se ha caracterizado por sus análisis incisivos de la sociedad burguesa de su país; gusta evidenciar la doble moral e hipocresía, y cuestionar con severidad la supuesta liberación sexual de la que Austria se ufana. En el caso de “Deseo”, la crítica está dirigida al ámbito individual y familiar, enfatizando la crueldad determinante en las relaciones interpersonales, así como las condiciones sociales adversas para la mujer.

La rebeldía es el punto nodal en la vida y obra de Elfriede Jelinek. Su intensa reflexión acerca de las contradicciones, vicios y problemas de su país (al que, incluso, considera continuador del pasado nazi), le ha significado ataques de la ultraderecha austriaca, y después de que Jörg Haider asumió el poder gubernamental, algunas de sus obras fueron prohibidas. Elfriede Jelinek está considerada como una de las escritoras más importantes e influyentes de la literatura contemporánea. “Deseo” es una de las piezas clave de las muchas que articulan su obra trascendental.

Comentarios a esta nota: enrique.montanez@azteca21.com

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