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Para bien de su
población la civilidad
retorna a la capital
oaxaqueña
Foto: Internet
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Ciudad de México.- 19 de Noviembre del 2006.- Agobiada por el conflicto político-social de los últimos 180 días, en cuyos momentos más álgidos llegó a tener hasta tres mil 800 barricadas, y a tres semanas de la incursión de la Policía Federal Preventiva (PFP) a la capital, Oaxaca recupera poco a poco la normalidad.
Sus pintorescas calles se llenan cada día más de pequeños comercios, que muestran su artesanía, sus pinturas y su cultura, mientras que el comercio formal reabre sus puertas en señal de que la vida en Oaxaca está regresando a la regularidad.
La "ciudad fantasma", que parecía en el momento de mayor convulsión a raíz del conflicto, quedó atrás; el transporte público funciona ya a toda su capacidad, la vida nocturna ha retomado su ritmo y el turismo, tanto nacional como extranjero, aunque aún muy poco, ya se puede ver por las calles admirando la belleza de su arquitectura virreinal.
Ubicada en el suroeste de México, en la sierra Madre del Sur, la ciudad de Oaxaca muestra gran vitalidad en el abigarrado mercado principal, dominado por el verde, el rojo y el rosa chillón. Son los colores más abundantes en las telas de la zona, tejidas a mano y decoradas con motivos propios de la región.
Los centros comerciales de las diversas plazas lucen llenos de gente que realiza las tradicionales compras de los fines de semana; los restaurantes se llenan de comensales, que acuden como en antaño, y el tránsito vehicular genera ya conflictos viales, cuando hace unos días, por sus calles y avenidas, nadie transitaba, exhibiendo una ciudad desierta.
Los rondines de vigilancia, en los que participan elementos de la PFP, así como de la estatal y municipal, en forma coordinada, se han convertido en algo normal en la ciudad de Oaxaca, hasta hace apenas unos días a merced del hampa.
Camiones repartidores de diversas mercancías, que hasta hace 10 días no penetraban a la capital por temor a ser despojados de sus unidades, por parte de integrantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), para incendiarlas y luego colocarlas de barricadas, ya distribuyen sus productos sin recelo.
Las clases en las escuelas de educación básica, tanto de la capital como del estado, han iniciado y en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO) se reinician los cursos de manera ordinaria a partir del próximo martes 21 de noviembre, según lo dio a conocer oficialmente el rector de esa máxima casa de estudios,
Francisco Martínez Neri.
Por lo que hace a la barricada de "Soriana", que se mantiene en pie desde hace varios meses, y que llegó a ser una de las más significativas para el movimiento de la APPO, por encontrarse a un costado de la UABJO, será retirada el mismo martes.
Así, todo parece indicar que la ciudad de Oaxaca, considerada como uno de los destinos turísticos privilegiados de México, por la belleza y armonía de su arquitectura virreinal, la riqueza de sus costumbres, de su folclore y de su extensa variedad gastronómica, pronto volverá a recuperar de la normalidad. (Notimex)
