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Un disco impregnado
de los aires de la
música popular latinoamericana
Foto: Azteca21
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Por Gregorio Martínez Moctezuma
Corresponsal Azteca 21
Ciudad de México. 15 de noviembre de 2006. La voz, el sentimiento, la música, el tono, la atmósfera creados en el disco “Como te amaba yo” (Ediciones Pentagrama, México, 2006), del guitarrista y cantante argentino Delfor Sombra –radicado en nuestro país desde 1976– convocan y evocan al amor, en el más pleno sabor romántico, bohemio, muy a la manera de la trova o del bolero –en última instancia, más cerca de la milonga que del tango.
Sí, no en vano Delfor ha vivido tantos años en nuestro país y su trashumancia artística le ha brindado múltiples aires de la música popular latinoamericana, pero en este caso la que se canta con una guitarra –o con un conjunto de cámara, muy al estilo del café-cantante– y al oído de la mujer amada.
El disco abre con “Cielito mío”, una bellísima canción que es la declaración de amor y de la atmósfera del disco, porque eso son la canción y el disco, una declaración y una creación de atmósferas amorosas –incluso la más “tropicalizada” de “Décimas al río”, creada al alimón con el cubano Lázaro García, o “Si después”, más rítmica y bailable– que invitan a la reflexión y delectación del amor y sus fantasmas.
Esto es fundamental: la armónica presencia o simbiosis entre la palabra y la música, que da como resultado una redimensión de la palabra, del poder de ésta, de la poesía. Me explico: las canciones de este disco son poéticas, pero con una significación casi literal, no muy metafórica, por decirlo así. De ahí el título del disco y de uno de los once temas que lo integran “Como te amaba yo…”, un fragmento tomado de un verso del famoso epigrama amoroso del poeta nicaragüense Ernesto Cardenal, que me voy a permitir citar para ejemplificar lo antes dicho: “Al perderte yo a ti tú y yo hemos perdido:/ yo porque tú eras lo que yo más amaba/ y tú porque yo era el que te amaba más./ Pero de nosotros dos tú pierdes más que yo:/ porque yo podré amar a otras como te amaba a ti/ pero a ti no te amarán como te amaba yo”. Delfor Sombra lo mezcla acertadamente con otros epigramas de Cardenal y nos regala una canción amorosa que no pierde nada de sentido y sí adquiere una musicalidad que los versos solos no tienen. Mérito aparte es la frescura con la que presenta temas de artistas clásicos de Nuestra América, como Atahualpa Yupanqui y Víctor Heredia, por ejemplo.
Las otras canciones, además de las ya dichas, son “Huella de ida y vuelta”, “Para qué”, “Mar y Luna” (excelente versión del inolvidable tema de Chico Buarque), “Elogio a una copa”, “De la calandria”, “El adiós” y “Rosa de los vientos”. También hay que mencionar los excelentes arreglos de Tato Finocchi –en los temas donde el piano sostiene a las letras– y Mariano Delgado –en los que la guitarra desgrana sus lamentos y alegrías–, así como a Julio Lacarra, el productor artístico. “Como te amaba yo…” se grabó y mezcló en octubre y noviembre de 2005 en La Plata, Argentina.
Delfor Sombra
Nació en La Pampa, Argentina. De sus mayores heredó la afición por el canto y la guitarra. En 1973, junto a Cacho Arenas, formó el dúo Sombrarena, con el que grabó un L.P.: “Voces de la patria Baya”, un compendio de canciones regionales argentinas que los ubicó como músicos del Movimiento de la Nueva Canción. Ya establecido en nuestro país, formó parte de Sanampay, con el que grabó cuatro discos y realizó varias giras por México y otros países latinoamericanos. Por esos años también fue guitarrista acompañante de Alfredo Zitarrosa, uno de los grandes cantautores latinoamericanos, con el que grabó dos discos. Ya como solista, ha compartido escenarios y grabaciones con artistas como Óscar Chávez, Betsy Pecanins, Lilia Vera, Luis Enrique y Carlos Mejía Godoy, Adrián Goizueta y Tania Libertad. En Ediciones Pentagrama han aparecido otros discos de Delfor Sombra.
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