El director musical Sergio Cárdenas ha creado la obra en cinco partes “Beethoven visita México”

 El director musical Sergio
Cárdenas ha creado
"Beethoven visita México"
Foto: Internet

Guanajuato, Gto.,  20 de Octubre de 2006.-  El director musical Sergio Cárdenas ha creado "Beethoven visita México", un collage en cinco partes en el que dialoga la obra del compositor alemán con la música mexicana, en lo contestatario, que les es común.

El concierto-collage para solistas vocales, solistas instrumentales, coro mixto y orquesta sinfónica, representa una confrontación, pues una de esas cinco piezas que conforman el programa que tendrá su estreno mundial en la Explanada de la Alhóndiga de Granaditas, es un rap a cargo del dramaturgo, director escénico y ahora rapero Claudio Valdés Kuri.

Cárdenas afirmó a Notimex que le interesaba indagar en esa  característica contestataria y a veces hasta explosiva de Beethoven,elemento que también está presente en la música mexicana, y que en su programa musical va siempre abordada con una gran finura.

"Beethoven en ningún momento, siendo un revolucionario en la composición musical, pierde la compostura, no porque sea una necesidad social, sino porque obedecía al principio fundamental de la condición musical, que es respetar la esencia del fenómeno del sonido, esos elementos son los que le dan estructura a la pieza a lo largo de las cinco partes que la componen", comentó el músico mexicano.

A lo que se refiere con la protesta, es que el espíritu beethoveniano que combina lo impulsivo, lo explosivo y lo revolucionario, con lo fino, lo exquisito y las formas correctas que siempre manifiestan una gran creatividad y un elemento agregado, hablan de la enorme admiración y respeto que tiene Beethoven y que se ve claramente en su música que habla de la grandeza del ser humano.

Dijo que Beethoven, de quien interpretarán la "Sinfonía No. 5, en do menor, op. 67", fue el primero en la historia de la música que colocó al ser humano ante Dios, al tú por tú "Beethoven Dios y el ser humano es lo mismo", donde radica su grandeza, porque la estructura tiene que ver más que nada con el espíritu que permea la creación beethnoveniana.

"Hay mucho de contestatario en su música y también en la música mexicana, yo soy de la convicción que los huapangos que ahora han sido degenerados en simple divertimento en su origen eran una forma musical contestataria", dijo Cárdenas.

Añadió que "hay muchos elementos de rebelión y de protesta, desde su  estructura y su manera de manejar las formas, su origen es la vitalidad contestataria que caracteriza en espíritu la música de Beethoven".

Afirmó que su propuesta desde el principio quiso ser una composición musical que hiciera, entre otras cosas, un homenaje a lo que considera la universalidad de la música mexicana y en eso tiene muchas cosas en común con Beethoven, entre su espíritu musical y la música mexicana.

Cárdenas subrayó que hay una imagen equivocada o muy limitada en México y en el extranjero sobre lo que es la música mexicana, muchos piensan que es el mariachi y se acabó la historia, pero no es así porque en el territorio nacional hay una diversidad de manifestaciones.

Comentó que "el rap se inserta como una de las manifestaciones contestatarias más recientes en el mundo, nació como un derivado de la necesidad de las sociedades de los suburbios de oponerse a una imposición clasista, de manifestarse en la música solamente a través del canto o a través de lo operístico, que los grupos suburbanos siempre lo han visto como algo muy elitista".

Para Cárdenas, el rap tiene esas características de protesta, de rebelión, y lo tiene desde el nombre, rap que quiere decir golpe, golpear, se refiere a un texto normalmente agresivo y violento, que está servido con músicas ingenuas, con ciertos ritmos, pero casi sin nada de contenido.

"Aquí el texto no es cantado, ni entonado, no es manifestado por un bell canto, se golpea, ni siquiera se declama, se golpea, siendo una manifestación contemporánea y teniendo las características del espíritu beethoveniano, me pareció adecuado irme por ese camino, no es un rap en el sentido estricto de la palabra, se toman elementos con un texto de gran dimensión y profundidad", dijo Cárdenas.

Con base en la certeza de la universalidad musical, Cárdenas conformó el programa melódico especial para el 34 Festival Internacional  Cervantino, único lugar seguro donde se presentará el concierto, fueron los elementos que le dan la convicción y la certeza en las manifestaciones de la música mexicana.

"Quise confrontar todas esas manifestaciones con su propia riqueza, no estoy diciendo que Beethoven es mejor que la música mexicana o viceversa, no, cada una tiene su riqueza en su propio ámbito, no se trata ni de destruir a uno, ni de menospreciar a otra manifestación, sino que a través de esta confrontación que aspira a tener una calidad en su manera de presentarse, hacer ese reconocimiento universal", dijo.

En "Beethoven visita México", en el que participa además de Claudio Valdés Kuri, el tenor Alfredo Portilla, la pianista Guadalupe Larrondo y el violinista Francisco Ladrón de Guevara, hay elementos de rap, citas religiosas de Beethoven, y citas de la canción "Caminos de Guanajuato", de José Alfredo Jiménez, que encajan con esos elementos y con el espíritu que tiene la poesía.

Reconoció que no es una obra sencilla, sino que tiene muchos retos, hay muchos elementos aleatorios, puestos al azar, el coro debe gritar ciertas cosas, golpear ciertos textos, no entonarlos, tiene también efectos no típicos para un coro que requiere una orquesta de grandes dimensiones, con un aparato de percusiones muy grande.

El concierto, que es un homenaje a la universalidad de la música beethoveniana y mexicana, está a cargo de la Orquesta Sinfónica de Xalapa e incluye la participación del Coro de la Escuela Nacional de Música  de la UNAM y el Coro de la Universidad Veracruzana, que dirigen José Antonio Avila y David Arontes, respectivamente. (Notimex)

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