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Portada de una
música y una voz
que envenenan
y fascinan
Foto: Azteca21
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Por Gregorio Martínez Moctezuma
Corresponsal Azteca 21
Ciudad de México. 11 de octubre de 2006. Vino nuevo en odres viejos. Un disco llamado a ser clásico dentro de todo lo clásico que implica interpretar a Agustín Lara. Un viento poderoso que refresca las canciones de “El flaco de oro”. Una experiencia incomparable. Una maravillosa combinación de talentos que nos traen a un Lara redivivo.
Todas estas frases laudatorias podrían expresar de algún modo el gusto que ejercen sobre nuestros sentidos las canciones que integran “Agustín Lara. El veneno que fascina”, de Margie Bermejo (voz) y Dimitri Dudin (piano), un disco no de colección ni para coleccionistas: un disco que debe estar en la discoteca de los numerosos admiradores del músico poeta chilango con alma de jarocho y en la de todos los amantes de la buena música a secas.
Indudablemente, un mérito insoslayable de este material es la acertada selección de canciones, los arreglos del maestro Dudin y la perfecta interpretación de éstas –de su sentido vital y poético– por parte de Margie Bermejo, una de las mejores cantantes mexicanas, que se ha caracterizado precisamente por ofrecer versiones personalísimas de la música que adapta a su voz, que brota a través de su voz. (Además, es una estupenda manera de tener al alcance –y disfrutar– la voz de Margie, que este año se retira de los escenarios, después de una larga y fructífera carrera, para ofrecer sus conocimientos y compartir sus experiencias con nuevos cantantes a través de la enseñanza.)
En el caso de “Agustín Lara. El veneno que fascina” (Ediciones Pentagrama, México, s.f.), hay versiones que suenan como si Lara hubiera compuesto la letra en días pasados especialmente para Margie, como “Talismán”, que adquiere en su voz una frescura y una vitalidad extraordinarias, inéditas. Algo similar ocurre con “Nadie”, “Noche de ronda”, “Mi rival” y “Azul”. Esto en mi muy particular gusto y opinión. Seguramente lo mismo puede pensar alguien más respecto de los otros temas que integran este disco: “Imposible”, “Piensa en mí”, “Solamente una vez”, “Dime si me quieres”, “Amor de mis amores”, “Como dos puñales” y “Arráncame la vida”.
Por supuesto, este disco también resulta muy oportuno para aquellos que no conocen la obra del maestrazo Agustín Lara, ya que representa una llave de oro para penetrar a ese mundo romántico y musical inolvidable. Además, créame, es una excelente opción si tiene que hacer un regalo. Sin duda, sería mucho más que una grata sorpresa: una verdadera declaración de amor contenida en un hermoso disco a través de una voz incomparable y una música deliciosa. Sí, es como si hubiera sido hecho especialmente para los amorosos. Sí, Margie Bermejo canta a Agustín Lara, canta al espíritu del amor. Déjese seducir y disfrútelo: no se arrepentirá.
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