“Ponciana”, excepcional disco compacto del cuarteto de guitarras Manuel M. Ponce

Portada de un disco que
muestra la riqueza
sonora escondida
en una guitarra
Foto: Azteca21

Por Gregorio Martínez Moctezuma
Corresponsal Azteca 21

Ciudad de México. 30 de septiembre de 2006. Nuestro suelo ha sido terreno fértil para las artes. Ejemplos de esta afirmación hay en todas las expresiones artísticas nacionales, desde pintura, pasando por escultura, literatura, danza, hasta cine, fotografía y música. En esta última podríamos mencionar muchos nombres, pero sin duda el de Manuel M. Ponce (Manuel María Ponce Cuéllar) ocupa un lugar de honor.

El músico zacatecano (Fresnillo 1886-ciudad de México 1948) dejó una impronta perdurable y única en la historia de la música mexicana y universal a través de su labor de profesor, compositor, director de orquesta y artífice del nuevo estatus de la guitarra como instrumento solista de concierto.

Así, resulta gratísimo escuchar el disco compacto de un cuarteto mexicano de ese instrumento de cuerdas que en su mismo nombre hace un homenaje permanente al maestro: el Cuarteto de Guitarras Manuel M. Ponce y el disco al que me refiero es “Ponciana” (Quindecim Recordings, México, 2005), que viene siendo una reedición, pues me parece que el mismo material ya había salido en otro disco del cuarteto grabado en otro sello discográfico allá por el ahora lejano año 2000.

En fin, “Ponciana” es una obra del maestro y compositor mexicano Julio César Oliva que no sólo da nombre al disco, sino también es, por decirlo de algún modo, el corazón del mismo. Me explico: aparte de ser un tributo a la obra guitarrística ponciana, es una pieza sólida, bien estructurada y con un sonido propio, que –necesaria, clásicamente– será parte del repertorio indispensable de este tipo de agrupaciones.

Las otras piezas incluidas en el disco son transcripciones de obras que no fueron escritas originalmente para guitarra y obras que sí lo fueron. En el caso de las primeras están dos clásicas de la música mexicana: “Huapango”, de José Pablo Moncayo, transcrita por el Cuarteto y Guillermo González, y “Cuarteto virreinal”, de Miguel Bernal Jiménez, transcrita por Manuel López Ramos, así como la “Suite Scaramouche”, del músico francés Darius Milhaud, transcrita por Maricarmen Costero. En cuanto a las segundas, están “Paisaje cubano con rumba”, de Leo Brouwer, de la misma nacionalidad, y “Punto y canto para cuatro ángeles”, del puertorriqueño Ernesto Cordero.

Definitivamente, “Ponciana” es un disco completo, formidable, en el que el Cuarteto de Guitarras Manuel M. Ponce nos brinda una singular muestra de la riqueza sonora y de colores que alcanza este instrumento, así como de sus excelentes interpretaciones. Escúchelo: después querrá conocer más grabaciones del Cuarteto, oír más música para guitarra.

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