Inicia XLVII Muestra de Cine en la Cineteca Nacional

Una escena de la cinta
española, ‘Princesas’
 Foto: Cineteca Nacional

Por Carlos Coronel
Reportero Azteca 21

Ciudad de México. 20 de abril de 2006. La XLVII Muestra Internacional de Cine arranca, en esta ocasión, con la novedad de contar con una buena cantidad de cintas iberoamericanas provenientes de Colombia, Argentina, Perú, Cuba, España y, por supuesto, México.

Cada película encara los problemas y desafíos de las sociedades modernas, con personajes sin grandes esperanzas, que luchan por sobrevivir y que encuentran asideros para seguir adelante. Por ejemplo, la película del madrileño Fernando León de Aranao, “Princesas”, aborda con acierto los prejuicios y diferencias entre los habitantes del primero mundo con la llegada de inmigrantes latinos. Caye es española y tiene una familia desesperante; su sueño es ponerse unas tetas grandes y por eso se dedica a prostituirse; en cambio, Zule es una dominicana ilegal, sola, que si trabaja en lo mismo es para mandar a su hijo dinero, del otro lado del Atlántico. La rivalidad entre los dos grupos no impedirá que Caye conozca a Zule, y juntas encuentren más lazos de amistad que diferencias.

En esta nueva edición, impulsada por la Cineteca Nacional, se proyectará por primera vez en México el documental de Juan Carlos Rulfo, “En el hoyo”, que ganó el Gran Premio del Jurado al Mejor Documental en el pasado Festival de Cine de Sundance. El filme sigue las vidas de varios obreros que, provenientes de otras partes del país, conviven por meses en las obras de construcción del Eje Vial San Antonio. “Se me antojaba hacer algo sobre mi tiempo, algo de la ciudad”, explica el hijo del autor de “Pedro Páramo” sobre este conmovedor relato de la urbe.

También destaca la proyección de “El cielo dividido”, el filme más reciente de Julián Hernández, quien parece abandonar los títulos largos de sus cintas, pero sin dejar a un lado la temática que lo ha distinguido, el mundo gay, y el uso del blanco y negro en la imagen para resaltar la voluptuosidad del cuerpo.

Con la exhibición de “Luces de la ciudad”, un clásico de Charles Chaplin, restaurado en su totalidad, los organizadores de esta muestra de primavera dejan entrever su compromiso con un cine duradero, deseable, abierto a todo el público, que trascienda sin dejar a un lado los problemas de la ciudad ni sus héroes y soñadores anónimos, como el vagabundo Charlot.

Cine de Brasil

El renacimiento del cine carioca, como se pudo comprobar en la pasada Semana de Cine Brasileño 2006, se debe en parte a la variedad de historias y gustos que ofrecen sus directores, guionistas, productores y público en general.

Ni siquiera tienen temor a hacer un remake del mexicano Antonio Serrano y su “Sexo, pudor y lágrimas”, sólo que menos dramático y chorero y sí más divertido bajo el título de “Sexo, amor y traición”, con la dirección de Jorfe Fernando y las gratificantes apariciones de las cariocas Alexandra Nerini, Heloísa Perissé, Malú Mader y la inolvidable Betty Faria.

Si bien, los filmes más sobresalientes son aquellos herederos que entablan lo que Glouber Rocha quería, un diálogo feroz entre espectador y pantalla. De esta manera “Casi dos hermanos” cuenta la amistad larga entre un luchador social, Miguel, y un jefe de bandas traficantes, Jorginho. Lucía Murat muestra desde dentro el drama de dos generaciones para quienes el mundo ha cambiado, junto con sus sueños e ideales. Si antes se caía en la cárcel por disentir, ahora éstas están llenas de narcos y drogadictos.

Con “Juego subterráneo”, un filme más bien intimista, el director Roberto Gerzit ofrece un retablo de la soledad que agobia a las grandes urbes. Martín es un pianista que anda en busca de su amor ideal, para encontrarlo traza un juego que sólo él entiende y que se desarrolla en el subsuelo, en el metro.

Así conoce a gente tan sola y extraña como él: una escritora ciega y una madre con su hija autista. Los problemas empiezan cuando Martín rompe sus propias reglas y deja de tener el control. Cintas bien logradas, divertidas y llena de sorpresas, como parte de este ciclo proyectado en la Cineteca Nacional.

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