“A gritos y sombrerazos”, periodismo hecho en México

El libro resume
diez años de trabajo
en el periodismo
cultural de la
década de los
ochenta
 Foto: Azteca21

Por Benjamín Solís
Reportero Azteca 21

Ciudad de México. 11 de abril de 2006. El libro “A gritos y sombrerazos”, de Patricia Vega, editado por el CONACULTA en su colección Periodismo cultural, es una breve selección de una fructífera trayectoria donde la autora nos muestra diez años de trabajo en el periodismo cultural en la década de los ochenta; aunque la periodista tiene una carrera mucho más larga, este libro nos ofrece diferentes opciones en el quehacer de esta especialidad. Una, la más importante, la valoración de los hechos bajo el estilo del periodismo cultural, y otra, por ejemplo, una exposición de varios de los sucesos que atrajeron la atención de un sector de la opinión pública en estos ámbitos.

La publicación, más que una muestra de una década de trabajo, trae consigo una visión panorámica de la vida cultural y sus actores —vida no pocas veces ríspida— de nuestro país, en particular de la ciudad de México. Es un testimonio que nos permite, a pesar del tiempo transcurrido, hacer una valoración de qué tanto hemos madurado, darnos cuenta de si nuestros tropiezos como sociedad los hemos superado o ahondado, sobre todo en la esfera de la tolerancia, elemento que marcó significativamente los casos que aquí se presentan, y por otro lado en el terreno de la prensa escrita para aquellos interesados en este género.

Entre la selección encontramos el largo conflicto que se generó a raíz de la película “Los motivos de Luz”, de Felipe Cazals, y la demanda que entabló la propia Elvira Luz Cruz; también la confrontación que se desató a partir de la no inclusión, por descuido o malentendido, de un crédito de Elena Poniatowska en el filme “Gaby, una historia verdadera”, de Luis Mandoki.

Otro desencuentro cinematográfico, el que surgió entre la pareja conformada por Laura Esquivel y el cineasta Alfonso Arau y la demanda que mutuamente se enfrascaron por los derechos de comercialización de la película “Como agua para chocolate”; el surgimiento casi clandestino del Canal 6 de Julio y su batalla por su registro legal, así como el encuentro-desencuentro del escritor Mario Vargas Llosa con Octavio Paz en 1990 por la famosa frase del autor de “La fiesta del chivo” de que “México es la dictadura perfecta…”.

Como dice la autora, este es un texto producto del difícil arte del intercambio de ideas, una práctica poco frecuente en nuestro país, aun en la esfera de la cultura y que se ve reflejada en sus páginas. Además, incluye varios enredos más: la censura en el cine con las cintas “Rojo amanecer” y “La sombra del caudillo”; la polémica desatada por los libros de texto gratuitos, el enfrentamiento de artistas y creadores contra las arremetidas de los grupos ultraconservadores que actúan como defensores del buen hacer y decir, etc.

“A gritos y sombrerazos” es un libro vigente, porque sólo conociendo nuestro pasado, y en este caso pasado inmediato, podemos comprender lo que sucede hoy. En palabras del escritor y periodista cultural Sergio González Rodríguez: “La reportera ha sabido hallar una zona intermedia en que las notas de ‘hoy para mañana’ se pueden leer como ingredientes perdurables para las interpretaciones y el estudio no sólo de facetas de coyuntura, sino de líneas y secuencias en que la memoria esclarece y funda verdades”.

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