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No al cigarrillo que se
debe tomar como ejemplo
en otras latitudes
Foto: Internet
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Calabasas, California.- 15 de marzo del 2006.- Calabasas, California, ciudad dormitorio ubicada a 50 kilómetros de Los Angeles, se convertirá a partir de este viernes en una de las regiones con mayores prohibiciones para fumadores en Estados Unidos.
Los personas que violen las disposiciones que prohíben fumar ahora en lugares públicos podrían enfrentar multas de 500 dólares y si son reincidentes serán llevados a prisión, establece la nueva ordenanza.
Ubicada a 50 kilómetros al noroeste de Los Angeles, Calabasas pondrá en marcha una nueva medida aprobada el mes pasado por el concilio de la ciudad que la convirtió así en “la primer ciudad libre de humo en el país”.
Aunque aún tendrá áreas designadas para fumadores, la ciudad estará inundada con carteles que rezarán frases como el que fumadores no son bienvenidos y otras que les recuerden que no pueden violar la ley.
Reforzando medidas previamente aprobadas no se podrá fumar en edificios públicos, ni paradas de autobuses, parques públicos y otras áreas públicas en donde pudieran estar presentes personas que no sean fumadoras.
La medida fue llevada al concilio por la estudiante Margo Arnold cuando presentó una queja a autoridades al señalarle que ella no fuma, pero que cuando probaba sus alimentos en la calle no los disfrutaba por fumadores.
“Cuando estoy sentada en una banca hay mucho humo de fumadores, a mi derecha a mi izquierda y me siento acongojada de solo respirar humo”, explicó.
En enero pasado California declaró al humo de segunda mano como un tóxico contaminante.
El alcalde de Calabasas, Barry Groveman, dijo que con estas disposiciones la ciudad está protegiendo la salud de sus ciudadanos con nuevas medidas.
“Esta nueva medida no prohíbe los cigarros, solo limita al público a la exposición del humo de segunda mano”, aclaró.
La nueva ley sobre humo de segunda mano es la primera en el país en prohibir que se fume en cualquier área publica en donde otros puedan oler un cigarro o recibir humo de un tabaco.
Estas áreas incluyen banquetas, parques, áreas exteriores de negocios, restaurantes, patios, centros comerciales y áreas comunes de condominios y casas.
Al aprobar la disposición la ciudad resaltó que 52 mil no fumadores mueren al año por el humo de segunda mano y de estos se incluyen tres mil de cáncer pulmonar. (Agencias)
