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El autor es profesor
emérito de la UNAM
y ha publicado más
de 1000 artículos
Foto: Cortesía FCE
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Por Fabiola López
Reportera Azteca 21
Ciudad de México. 22 de febrero de 2006. Esta tarde se llevó a cabo la presentación del libro “Historia general de la ciencia en México en el siglo XX”, escrito por el doctor honoris causa Ruy Pérez Tamayo, con los comentarios de Elías Trabulse y Marcelino Cereijido, grandes figuras de la ciencia mexicana, en la librería Octavio Paz del Fondo de Cultura Económica.
Ruy Pérez Tamayo, profesor emérito de la UNAM, tiene una amplia e importante trayectoria dentro de la ciencia; es egresado de la Facultad de Medicina de la UNAM, hizo su especialización en patología en Estados Unidos, para luego fundar y dirigir la Unidad de Patología de la Facultad de Medicina, así mismo ha pasado por otros puestos como director, profesor, becario, consejero en diversas instituciones, etcétera.
Además, ha publicado más de 1000 artículos de divulgación en revistas y diarios mexicanos y extranjeros, y ha recibido premios, tales como el Premio Nacional de Ciencias en 1974, el premio de Rohrer en 1977, en 2000 recibió el premio a la Excelencia Médica de la SSA, entre muchos más. Es doctor honoris causa de las universidades autónomas de Yucatán, Puebla y Colima.
Por otra parte, sus presentadores: Trabulse y Cereijido, mexicano y argentino, respectivamente, cuentan con una trayectoria igual de destacada. El primero, químico por la UNAM, recibió el premio internacional de la American Society for Testing and Materials, doctor en historia con más de 300 publicaciones históricas, en revistas especializadas, prólogos, notas y libros como “La ciencia en el sigo XIX” (1987), etc. El segundo, doctor en medicina por la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Buenos Aires, profesor emérito que recibió el Premio Nacional de Ciencias, y autor de algunos libros:
“Ciencia sin seso, locura doble”, “Por qué no tenemos ciencia”, etc.
De esta manera, la presentación de dicho libro se engalanó con tres grandes figuras de la ciencia que hablaron sobre su contenido, el porqué, para qué y los pronósticos de la misma como tal: “…La ciencia está en el centro del centro de los problemas del hombre…”,“Es una obra histórica que intenta describir la evolución de la ciencia del siglo XX en México”, mencionó Trabulse, al referirse al propósito de Pérez Tamayo al escribir el libro.
La importancia de la ciencia para Ruy es que ésta es una actividad humana creativa que hace investigación científica, y entre los datos que resaltan de la obra podemos señalar que está redactado por épocas, además de hacer la predicción de tres escenarios para la
ciencia: el negativo (donde se ve una disminución académica por bajos salarios y hay un escaso o nulo interés por la ciencia), el positivo (donde el Estado apoya la capacitación de jóvenes, hay un mejor nivel de vida en lo económico y social) y el realista-esperanzador (que toma la base histórica para decir que es la sociedad civil la que decide con su participación activa, si le interesa y le es necesaria la ciencia o no).
Aunado a ello, Cereijido mencionó que los investigadores que hacen ciencia, por lo menos en México, son una especie de “Sísifos laicos”, al construir durante 30 años ciencia, siendo que en este país de tercer mundo existe un “analfabetismo científico”, es decir: “no saber qué hacer con la ciencia”.
De la misma manera comentó que ésta no es lineal, asunto que el Estado no entiende, ya que hay una “epistemología bestial” al no recibir el apoyo necesario para su desarrollo, pues existe la creencia de que un país hace ciencia por ser rico, y no que un país es rico porque hace ciencia. “Estamos formando analfabetas científicos e investigadores, no están capacitados para convertir la información en conocimiento, sin cultura, y estamos en un caudillismo”, aseveró Cereijido.
En lo que toca al autor, sólo agregó, feliz y humildemente, dos anécdotas alrededor de las presentaciones de libros y debates acerca del saber.
Sin olvidar que por parte de los tres expositores quedaron las reflexiones sobre la importancia de la ciencia, la aceptación que el maestro Ruy tiene con los jóvenes de escuelas tanto públicas como privadas, por su labor incesante de hacer ciencia, explicarla, divulgarla y convocarla; así como la trascendencia de este libro que describe a la ciencia como un proceso histórico-complejo, y a la vez, el escrito logra ser un programa, una incitación o convocatoria para todo aquel que se interese por la misma. “Historia general de la ciencia en México en el siglo XX” fue editado por el Fondo de Cultura Económica.
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