La UNAM y la SOGEM presentan “México entrevistado”

Portada de un libro
que es necesario leer
Foto: Azteca21

Por Benjamín Solís
Reportero Azteca 21

Ciudad de México, 17 de febrero de 2006. La Universidad Nacional Autónoma de México, a través de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, y la Sogem acaban de publicar el libro "México entrevistado".

Entrevistas con escritores mexicanos”, de Hernán Becerra (Tapachula, Chiapas, 1958), escritor y periodista de tiempo completo, donde el autor hace una selección de decenas de entrevistas que ha reunido en su larga trayectoria periodística y que han sido publicadas en varios de los diarios más importantes del país, como “El Nacional”, “La Jornada”, “Excélsior”, etc. Pocos libros reúnen a tantas personalidades clave del pensamiento mexicano en un encuentro interesante, intelectual e informal.

Aquí están más de 35 entrevistas con escritores de las más diversas tendencias, todos ellos ocupan un lugar esencial en las letras mexicanas, entre ellos, Elena Poniatowska, Carlos Monsiváis, Victor Hugo Rascón Banda, José Joaquín Blanco, José Agustín, Rafael Gaona, Naief Yehya, Beatriz Espejo, Andrés de Luna, Hugo Gutiérrez Vega, Rafael Ramírez Heredia, entre otros.

También se encuentran algunos personajes que, si bien no son escritores, fueron considerados por el autor por su importancia en el pensamiento contemporáneo de nuestro país, por ejemplo: Leopoldo Zea, Ikram Antaki, Francisco Gómezjara, Teresa del Conde y Cuauhtémoc Cárdenas.

Éste es un libro con numerosas expresiones de la cultura, la historia y la filosofía. Desde su título uno sabe de lo que trata; sin embargo, hay que ir más allá, intuir lo que se puede encontrar en él, porque México siempre será un enigma para propios y extraños.
Nuestro país se presenta como un personaje con quien se puede conversar. Si bien se dice que las almas de un pueblo son sus poetas, la conciencia entonces serán sus escritores, ellos son quienes desenmarañan las fibras más ocultas de nuestro pueblo, sus pasiones, sus desencantos, las cosas buenas y las malas que forman nuestra identidad. Y qué mejor nombre que “México entrevistado”, un libro imprescindible para conocer mejor la cultura literaria de nuestro país, lo que piensan y dicen algunos de sus creadores.

Las entrevistas están hechas de una manera informal, en algunas de ellas la conversación fluye como una plática entre viejos amigos y Becerra Pino sabe encontar el lado humano, el lado interesante en sus interlocutores. Las anécdotas y las ideas corren de manera natural, se habla de los temas más variados, amén de que son una fuente de historias y experiencias que sólo la entrevista es capaz de reinventar.

La conversación inteligente es hoy un patrimonio muy escaso, puesto que vivimos en una época en la que nadie quiere escuchar y todo el mundo quiere hablar, pero no hay temáticas verdaderamente interesantes, nuestros temas son los eternos de siempre: el futbol, las telenovelas y los escándalos de la política y la farándula. Este libro se levanta como una opción desafiante en medio del gran vacío intelectual que permea a nuestra sociedad.

Algunas de las entrevistas se antojan leer, los títulos los extrae el autor de las propias declaraciones de los entrevistados, aquí unos cuantos:
“Mi formación es en el colegio de monjas”, entrevista a Elena Poniatowska; “Los amores latinos de Marilyn Monroe”, Rafael Ramírez Heredia, “El teatro desentraña la condición humana”, Víctor Hugo Rascón Banda; “En México no hubo propiamente un género de cine negro”, Carlos Monsiváis; “El boom latinoamericano es un fenómeno europeo”, Eugenia Revueltas; “Chiapas ha sufrido pésimos gobiernos locales”, Hugo Gutiérrez Vega; “Estoy a un paso de la muerte, pero en el camino hay que cantar”, Juan Cervera; “La familia está hecha para hacer infelices a los hombres”, Francisco A. Gómezjara; “Esencialmente soy poeta, aunque unos piensen lo contrario”, Dionicio Morales; “Lo único que me une a la nobleza son mis partes nobles”, Andrés de Luna; “A los 17 años se vale de todo, porque nada es definitivo”, Naief Yehya; etcétera.

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