POR LA ESPIRAL
Claudia Luna Palencia
-Bien por las reservas internacionales
-México destaca entre los emergentes
-Japón y China los países con más reservas
Qué lejanos parecen aquellos tiempos en los que las reservas internacionales de México estuvieron a cuentagotas, cuando las arcas no alcanzaban para cubrir ni siquiera un mes de importaciones, mucho menos para hacer frente a los pagos de los pasivos contratados con los acreedores internacionales.
Las reservas internacionales forman parte del compendio de la tragicomedia mexicana en la parte económica, en los capítulos de los saqueos, inviabilidad financiera, pérdida de liquidez y de solvencia.
En la historia de las reservas encontramos apartados vergonzosos como la fuga de capitales del 20 y 21 de diciembre de 1994, cuando unos cuantos mexicanos sacaron 4 mil 633 millones de dólares de las reservas internacionales, un hecho inédito que explica el ex presidente Carlos Salinas de Gortari, en su libro “México, un paso difícil a la modernidad” . En un solo día, Banco de México perdió prácticamente la mitad de todas las reservas.
En la actualidad, afortunadamente en plena matinée de siglo XXI, las reservas internacionales siguen aumentando para tranquilidad de la economía (de todos) por el oxígeno financiero que representan.
Cada martes Banco de México actualiza su posición de activos, al 30 de diciembre de 2005 reportó un saldo de las reservas internacionales por 68 mil 669 millones de dólares, un alza de 11.66% respecto al saldo de cierre del 31 de diciembre de 2004 por 61 mil 496 millones de dólares.
La acumulación de reservas internacionales es el resultado de las transacciones que un país realiza con el exterior como son las exportaciones, los créditos de bancos extranjeros, la inversión extranjera en el país; etc.
Cabe mencionar que desde 1996, durante el gobierno de Ernesto Zedillo, la Comisión de Cambios estableció una estrategia para favorecer la acumulación de reservas mediante un esquema de compras del instituto emisor cuando el mercado esté ofrecido.
Años después, el 20 de marzo de 2003, la misma Comisión de Cambios anunció la puesta en marcha de un mecanismo no discrecional para reducir el ritmo de acumulación de reservas a través de vender dólares directamente en el mercado.
Un país con un buen nivel de reservas es una carta de confianza para los agentes económicos que evalúan la solidez financiera de la economía dado que aprecian la existencia de un margen de acción para enfrentar cualquier eventualidad derivada de un shock externo que atente contra la cuenta corriente o el flujo de capitales.
En México, las reservas internacionales están constituidas por: 1) Las divisas y el oro propiedad del banco central que se hallen libres de todo gravamen y cuya disponibilidad no esté sujeta a restricción alguna. 2) La posición a favor de México con el FMI derivada de las aportaciones efectuadas a dicho organismo. 3) Las divisas provenientes de financiamientos obtenidos con propósito de regulación cambiaria del FMI y otros organismos de cooperación financiera internacional o que agrupen a bancos centrales, de bancos centrales y de otras personas morales extranjeras que ejerzan funciones de autoridad en materia financiera.
¿Para qué sirven las reservas internacionales de un país? Tienen una función básica para la política monetaria, para el respaldo de la moneda frente a su cotización con otras divisas, en el caso de México respecto al dólar. Lo son también para garantizar las obligaciones contraídas por el país, para dar solvencia y liquidez a las amortizaciones correspondientes frente a organismos acreedores.
En un régimen de tipo de cambio flotante -el esquema actual del peso versus dólar-, las reservas amparan a la moneda. En los últimos meses podemos observar que para el caso del peso mexicano se ha dado una revaluación respecto al dólar, circunstancia que obedece a tres factores: el externo, donde la política estadounidense busca mantener un dólar barato en el mercado internacional; la mayor entrada de divisas extraordinarias producto de las alzas de los petroprecios; y la constante acumulación de reservas internacionales.
A nivel internacional se utilizan diferentes indicadores acerca de las reservas internacionales referidos a los principales usos que tienen las divisas, como el pago de las importaciones. Se establece, como mínimo, el pago de tres meses de importaciones de bienes con las reservas internacionales.
En México, los datos sobre el comercio exterior los proporciona el INEGI, que en la información más reciente, de enero a noviembre de 2005, indica que las importaciones sumaron un total de 200 mil 668 millones de dólares. Las importaciones en promedio mensual en los once meses fueron por 18 mil 242.5 millones de dólares. Las reservas nos permitirían cubrir más de tres meses de importaciones.
A COLACIÓN
Hace quince meses escribimos que México destacó en el noveno lugar dentro un grupo de diez países cuyos bancos centrales poseen las mayores reservas internacionales en el mundo.
En el Fact Book de la CIA (son datos al cierre de 2004) destaca nuevamente Japón y China con las mayores reservas en dólares y en oro. La posesión de dólares es tan grande que cualquier maniobra de Japón o de China para desacumular reservas en dólares ocasionaría un desequilibrio global y un colapso en la economía estadounidense además de sepultar al dólar.
Según los datos recabados: Japón tiene reservas por 664 mil 600 millones de dólares; China por 609 mil 900 millones de dólares: le sigue Corea del Sur con 199 mil 100 millones de dólares; India con 126 mil millones de dólares; Rusia con 124 mil 500 millones de dólares; Singapur con 112 mil 800 millones de dólares; Alemania con 96 mil 840 millones de dólares; Estados Unidos con 85 mil 940 millones de dólares; Francia con 70 mil 760 millones de dólares; Italia con 61 mil 500 millones de dólares; y México aparece en este cuadro con datos de 2004 con 60 mil 670 millones de dólares, es el único país de América Latina en sobresalir por sus reservas internacionales. Al cierre de 2005 aumentaron y esto ubica a México en un mejor contexto en dicho renglón.
En septiembre del año pasado las autoridades de China anunciaron que sus reservas internacionales crecieron a 769 mil millones de dólares, aclararon que todavía seguían por debajo de las reservas de Japón, un dato que esperamos conocer pronto.
P.D Llevamos meses proponiendo usar parte de las reservas y de los ingresos extraordinarios de los petroprecios para pagar la deuda externa del sector público no sujeta al público inversionista. ¿Será que podrá lograrse este año?
Agradezco sus comentarios a:claulunpalencia@yahoo.com