Susana Zabaleta, convertida en una diosa del escenario, cosecha un sonoro triunfo en el Cervantino

Susana estuvo
 simplemente extraordinaria
Foto: Página Oficial

Guanajuato, Guanajuato.- 10 de octubre del 2005.- Susana Zabaleta, la cantante y actriz que lo mismo interpreta óperas bufas, modernas y clásicas, que rock, rancheras y boleros, puso de pie al público del Teatro Principal tras su concierto "Para darle cuerda al mundo", espectáculo lleno de buen humor, sensualidad y talento, que es un canto a la libertad y al amor, y una invitación al hombre para ser más humano.

El recinto cultural guanajuatense, en el marco del XXXIII Festival Internacional Cervantino, se entregó por completo a la Zabaleta, como ella se hace llamar. Le aplaudió largo agradeciendo su talento, su desparpajo, su voz y su sensualidad, tanto que la cantante visiblemente emocionada cantó un fragmento de "La Traviata", ópera que ha cantado y que la regresó a sus inicios.

Acompañada de los pianistas Dimitri Dudin, director musical y realizador de los arreglos de las canciones que integraron el espectáculo, en su mayoría de Liliana Felipe, y de Mauricio Náder, la cantante demostró su talento en un concierto que incluyó temas como "Las suculentas", "Madame Bovary", "No te lo puedo decir", "Mala", "Los vecinos" y "Toccatta".

Tanto se emocionó Zabaleta con su participación en el Cervantino, que dijo es un sueño hecho realidad, y tanto le aplaudían los asistentes al concierto, que se salió del programa y cantó a capella el tema de la comedia musical "Cats" y "Bésame mucho", con el que bajó del escenario para cantárselo al oído o sentada en las piernas de algunos caballeros.

Para deleite de las miradas masculinas, la actriz y cantante salió con un vestido anaranjado abierto de la pierna izquierda, que dejaba ver un sensual liguero negro; luego cambió de vestuario, porque, dijo, "soy norteña pero no coda y me mandé a hacer dos vestidos", con un azul igual de sensual.

Su talento la ha llevado al teatro, a la comedia musical y al cine, pero es en la música donde sigue incursionando con fuerza, en las últimas fechas lo ha hecho, precisamente, con su espectáculo Para darle cuerda al mundo, en el que intenta mover al ser humano a que se enamore, goce, sienta, viva, ame, sueñe, concrete y sea libre.

Entre tema y tema, la cantante cuenta anécdotas, experiencias, momentos de su vida, porque así lo ha hecho siempre, con un desparpajo que provoca la risa de los espectadores.

Y tanto lo logró, que la risa era profunda, larga y surgía a la menor provocación; ella fue la diosa sobre el escenario, que lo mismo hablaba de política y partidos, que de los hombres y la vida; sin crítica, con el único afán de gozar, de contar y cantar, de reír y de hacer pasar a los asistentes un momento de buen humor.

Las canciones que son ya de por sí atípicas y alejadas de las temáticas convencionales se conjugaron con la voz de la Zabaleta, que está bien educada, no por nada estudió en Florencia y Roma clases de canto, pero también por el excelente trabajo del pianista ruso Dimitri Dudin, en los arreglos musicales.

Para darle cuerda al mundo le permitió a la actriz cumplir su sueño de cantar en el Cervantino, aunque hace un año, cuando cantó algunas arias con la Orquesta Sinfónica Nacional, le dijo desde el escenario al gobernador de Guanajuato, Juan Carlos Romero Hicks, que la invitara y la invitó. Por eso le dedicó el tema de "Toccatta". (Notimex)

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