Miles de fieles elevan sus oraciones en la Plaza de San Pedro para rogar por Juan Pablo II

La Plaza de San Pedro en Roma

Ciudad del Vaticano.- 1º de abril del 2005.- Más de 50.000 personas están concentradas en el entorno del Vaticano para mostrar su solidaridad con Juan Pablo II, mientras se apaga su vida.

En medio de una gran emoción y en un ambiente de recogimiento, los fieles están reunidos en la Plaza de San Pedro para participar en una vigilia convocada para respaldar al anciano Papa Wojtyla, de 84 años y 26 al frente de la Iglesia católica.

En las últimas horas los fieles han llegado en un flujo continuo a la Plaza de San Pedro, donde se ha realizado el rezo del rosario bajo la guía del vicario general del Pontífice para la Ciudad del Vaticano, monseñor Angelo Comastri.

"Esta noche Cristo abre sus puertas al Papa", ha dicho un conmovido Comastri a los congregados, antes de dar paso a la oración.

Al concluir el rosario, ha invitado a los presentes a rezar por Juan Pablo II y a no abandonar la Plaza de San Pedro, que a diferencia de lo habitual permanecerá abierta durante toda la noche para acompañarle en su agonía.

Mientras algunos fieles oraban en silencio, un grupo de personas ha comenzado a entonar cantos, sin levantar demasiado la voz, en las inmediaciones del Palacio Apostólico, donde se encuentra el Obispo de Roma.

Informado desde el principio de la gravedad de su estado, el Pontífice prefirió permanecer en sus aposentos de la Santa Sede en lugar de ingresar de nuevo en el Policlínico Gemelli de Roma, según informó el portavoz vaticano, Joaquín Navarro Valls, en una comparecencia realizada a primera hora de hoy.

El parte oficial más reciente, divulgado a última hora de la tarde de hoy, indicaba que el cuadro clínico del Papa, que muchos expertos consideran irreversible, se había agravado aún más y habían empeorado las condiciones cardiorrespiratorias. (Agencias)

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