Chespirito y Doña Florinda se casan por lo civil

Roberto Gómez Bolaños
El Universal
"Es un instante de felicidad fugaz, pero de compromiso eterno", afirman

Esta es una historia de amor y humor. Luego de vivir juntos durante 27 años, Roberto Gómez Bolaños y Florinda Meza llegaron al restaurante San Ángel Inn para casarse por el civil.

Antes de entrar a la ceremonia, le preguntaron al novio: ¿qué sentía? Roberto puso cara de serio y respondió: "Pues que todavía me puedo arrepentir".

Florinda correspondió con una sonrisa de cómplice y cuando le preguntaron cómo veía estos 27 años de vida en pareja, ella replicó: "Han sido como 10 minutos… pero debajo de la lluvia".

A las puertas del restaurante, Roberto y Florinda se dieron un beso como preámbulo a su boda que definieron como "un instante de felicidad fugaz, pero de compromiso eterno".

Esa fue la historia de amor. Pero Roberto Gómez Bolaños, Chespirito , y Florinda Meza también pareja cómica que le abrió brecha a Televisa en el mercado sudamericano a través de sus personajes del Chavo del 8, Doña Florinda, El Chompiras y La Chimoltrufia.

Por eso, Emilio Azcárraga Jean, presidente de Televisa, asistió a la boda: "No tenía la obligación de venir pero me invitaron y quise estar aquí para felicitar a esta maravillosa pareja.

Los programas de don Roberto sin duda ayudaron a la comercialización de la empresa en Sudamérica pero además, le tenemos un gran cariño. No fue fácil escogerles un regalo pero finalmente les preparamos una sorpresa que creo que vale la pena".

A la boda también asistieron Chantal Andere, Jaqueline Andere, Édgar Vivar, los seis hijos de Roberto Gómez Bolaños y algunos ejecutivos de Televisa que fungieron de testigos.

Beatriz de León, publirelacionista de la pareja, explicó que no se permitió el acceso a la prensa para cuidar la salud de Chespirito . Antes de que llegaran los novios, De León dijo: "Ya saben que él se pone muy tenso frente a las cámaras. La verdad, primero queríamos que llegara a la boda y si se enfrenta a ustedes tal vez no pudiera llegar".

Pero Roberto Gómez Bolaños llegó; un poco retardado pero saludable y fuerte. Le preguntaron si la espera había sido demasiado larga. El novio bromeó: "Pues sí, se nos hizo un poco tarde, pero ya estamos aquí". Porque esta boda también es una promesa de vida que Roberto hizo mientras estuvo enfermo a causa del herpes.

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